El vocero presidencial, Manuel Adorni, lanzó una fuerte crítica al PRO. Dijo que el partido que gobernó durante años la Ciudad de Buenos Aires y lideró el país hoy está reducido a un rol vecinalista. Según Adorni, el PRO ya no es parte de la discusión nacional y perdió conexión con las demandas actuales.
En su rol de candidato en CABA, Adorni fue directo: “Han sido parte de la solución durante un tiempo, pero hoy quedaron obsoletos”. Consideró que la fuerza amarilla contribuyó al regreso del kirchnerismo al poder y que, en el plano nacional, ya no ofrece respuestas concretas.
Resultados que marcan un nuevo escenario político
Las declaraciones llegaron tras los comicios del domingo, donde la alianza entre la UCR y La Libertad Avanza se impuso en Chaco. En la capital salteña, los libertarios también lograron una victoria clara. Para Adorni, estos triunfos reflejan una tendencia que deja al PRO fuera del mapa político nacional.
“El oficialismo hizo una gran elección. Eso también muestra que la gente está eligiendo otra cosa”, sostuvo. Sin mencionarlo directamente, apuntó a que el PRO ya no compite con peso ni en las provincias ni en la ciudad que gobernó durante 16 años.
Reconocen el pasado, pero marcan un retroceso
Manuel Adorni admitió que la ciudad mejoró durante los años de gestión del PRO. Sin embargo, subrayó que el presente es distinto: “Todos coincidimos en que la ciudad está mejor con el PRO que antes, pero también en que hoy está peor que hace uno o dos años”.
Para el vocero presidencial, el problema no es lo que hicieron en el pasado, sino su falta de adaptación al nuevo contexto político. Por eso, afirmó, su rol actual es más local que nacional.
El electorado cambió y el PRO no reaccionó
Con el crecimiento de La Libertad Avanza, el PRO perdió el lugar que tuvo como fuerza opositora principal. Para Adorni, los libertarios lograron captar a un electorado que busca respuestas rápidas y un discurso más firme. Mientras tanto, el PRO quedó en una zona gris.
“La gente ya entiende que no son parte de la solución actual”, remarcó. Y agregó que el partido no supo construir una nueva identidad para seguir siendo competitivo.
Un PRO sin rumbo en medio del cambio político
Desde la mirada de Adorni, el PRO ya no tiene peso nacional. Lo ve como una estructura sin liderazgo claro, limitada a una escala barrial. “Hoy ya no son parte de la discusión para frenar al kirchnerismo”, afirmó.
Mientras los libertarios y radicales se posicionan en distintos distritos, el PRO se enfrenta al desafío de no desaparecer del escenario nacional. Para Adorni, si no hay un giro profundo, su papel quedará acotado a lo vecinal.
