La interna en La Libertad Avanza estalló una vez más en redes sociales. Esta vez, las protagonistas del cruce fueron las diputadas Marcela Pagano y Lilia Lemoine, quienes se lanzaron dardos personales tras la presentación de un proyecto de ley que propone exámenes psicofísicos obligatorios para legisladores nacionales. Pagano impulsó la iniciativa, y Lemoine no tardó en burlarse. Publicó una imagen del proyecto acompañada por emojis de risa y lanzó: “Se lo firmo, pero tiene que prometer que no lleva más el megáfono al hemiciclo ni usa a su bebé para forzar una foto con el Presidente”.
La referencia fue directa a una recordada escena en la que Pagano, megáfono en mano, denunció que no se le reconocía su presidencia en la Comisión de Juicio Político. Pero esta vez, la experiodista no dejó pasar la burla: “Si se llega a convertir en ley, estás afuera del Congreso”, respondió, y fue aún más lejos: “No me hagas hablar de tu diagnóstico, porque a tu golpe bajo tengo muuuuchos elementos (pruebas) para responderte y que el mundo sepa la enfermedad que tenés y que te convierte en inidónea para el cargo. Sos triste”.
Lemoine arremete
Lemoine no se quedó callada y aceptó el desafío de someterse al test. Pero en su respuesta arrojó un misil personal: “Pero solo si vos nos contás quién es el papá de tu hijo... Aunque vas a insistir con que es inseminación de un donante porque, de lo contrario, perdés el fideicomiso”. Ahí, Pagano explotó: “Lacra”, arrancó. “La información acerca de la identidad de mi hija es pública. Está inscripta como corresponde, es una bebé amada, sana y deseada. Tanto nos ocupamos de ella que en el Congreso está a diario a mi lado. Y yo también soy muy amada”.
Y siguió, sin freno: “Por suerte, no tuve que esperar la promesa de ningún fin de mandato para poder gestar un bebé, como te hicieron a vos. Ni ando mintiendo como vos diciendo que tenés óvulos inseminados de un ‘hombre del poder’ congelados. Ni tampoco le pedí a un chico de 22 años que me embarace y desconozca la paternidad, como hiciste vos, encima prometiéndole a cambio un proyecto de ley para que ‘se quede tranquilo’”.
Las acusaciones escalaron a niveles nunca antes vistos entre dos diputadas del mismo bloque. “Usás tu banca en tu beneficio propio, ridícula, y encima te creés que aportaste algo a que Milei sea presidente. Sos tan patética que por celos le faltaste el respeto al Presidente hablando de su intimidad”.
La tensión no es reciente
La tensión entre ambas no es nueva. La enemistad se arrastra desde la campaña electoral, cuando Pagano, cercana a Milei, recibió un lugar privilegiado en la lista de diputados. Lemoine, más visible en redes que en el Congreso, fue relegada a un octavo lugar que aún hoy parece molestarle.
Pagano cerró su embestida con un nuevo reto: “Lo del fideicomiso ni idea, pero presentá las pruebas porque sino tenés vos que hacerme una denuncia penal ya que ambas somos políticamente expuestas, ¿no?”.
Y volvió a insistir con su desafío público: “Y no esquives la cola a la jeringa: ¿cuándo vamos al hospital público y nos sometemos a la pericia psicofísica y rinoscopia ambas?”.
Una pelea que comenzó por un proyecto de ley terminó revelando una rivalidad feroz, visceral y cargada de resentimientos personales. Mientras tanto, el bloque oficialista en Diputados guarda silencio ante el fuego cruzado entre dos de sus figuras más mediáticas.
