El Producto Interno Bruto (PIB) registró una suba del 5,8% interanual durante el primer trimestre de 2025, según informó el INDEC. La economía también mostró un crecimiento del 0,8% respecto al último trimestre de 2024.
Aunque el número superó las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), que esperaba un alza del 5,5%, el impulso principal no vino del aparato productivo sino de la recaudación impositiva.
El componente con mayor impacto positivo fue el de impuestos netos de subsidios, que aumentó un 10,8% interanual y aportó 1,83 puntos porcentuales al crecimiento total.
En contraste, el rubro de Administración pública y defensa tuvo la mayor incidencia negativa, al registrar una caída del 1,2% y restar 0,66 puntos al PBI. Desde el punto de vista de la demanda, la formación bruta de capital fijo fue el componente que más se destacó, con una expansión interanual del 31,8%.
También crecieron el consumo privado (11,6%) y las exportaciones de bienes y servicios reales (7,2%), mientras que el consumo público cayó un 0,8%. En términos mensuales, la inversión aumentó un 9,8% frente al trimestre anterior, el consumo privado subió 2,9% y las importaciones se dispararon 17,7%.
Por el contrario, el consumo del sector público y las exportaciones mostraron leves caídas del 0,1% y 1,5%, respectivamente.
Entre los sectores económicos, la intermediación financiera lideró el crecimiento con una suba del 27,2% interanual. También tuvieron desempeños destacados pesca (11,6%), hoteles y restaurantes (9%), comercio (7,3%) y construcción (6,1%).
La industria manufacturera creció un 5,1%, mientras que el sector agropecuario registró un aumento del 3,7% y la explotación de minas y canteras subió un 6,6%.
En el otro extremo, los hogares privados con servicio doméstico cayeron un 2,2%, los servicios comunitarios y personales bajaron 1,6%, la salud retrocedió 0,6% y la administración pública cayó 1,2%.
En total, la oferta global (la suma del PBI y las importaciones) creció un 13% interanual, impulsada no solo por el crecimiento interno, sino también por una fuerte suba del 42,8% en las importaciones de bienes y servicios.
