El fútbol argentino atraviesa horas de luto tras la inesperada muerte de Camilo Nuin, joven promesa del Club Atlético San Telmo. El jugador, de apenas 18 años, perdió la vida este miércoles por la mañana mientras era intervenido quirúrgicamente de una de sus rodillas. Su partida conmocionó al ambiente del ascenso y dejó una enorme tristeza entre quienes lo conocieron.
La operación que terminó en tragedia
Aunque aún no se determinaron las causas exactas del fallecimiento, el club confirmó que Camilo Nuin murió durante la cirugía. La intervención formaba parte del proceso de recuperación física del futbolista, que integraba la categoría 2006 y jugaba en la Reserva de San Telmo. Su entorno, compañeros y cuerpo técnico quedaron devastados por la noticia.
El mensaje de San Telmo y el homenaje a su entrega
A través de un comunicado oficial, la institución expresó: “Esta mañana, mientras estaba siendo operado de su rodilla, falleció Camilo Nuin, jugador de la Reserva del Club Atlético San Telmo. Las causas aún no fueron determinadas”. Luego, el club agregó: “Profundo pesar entre quienes compartimos horas con él, en el vestuario, en cada entrenamiento, en cada tarde defendiendo los colores del club. Fueron 82 partidos vistiendo la camiseta de San Telmo, dejando todo por estos colores”.
El mensaje cerró con un sentido pésame: “Desde nuestro medio, y en nombre de toda la gran familia santelmista, enviamos nuestro más sincero pésame, acompañando en este momento de inmenso dolor a sus seres queridos”.
Acompañamiento y duelo en el fútbol argentino
La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) también se pronunció al respecto. Desde la cuenta oficial de Fútbol Juvenil e Infantil se publicó un sentido mensaje: “La Comisión de Fútbol Juvenil e Infantil de AFA lamenta profundamente el fallecimiento de Camilo Ernesto Nuin, jugador juvenil del Club Atlético San Telmo. Nuestro mayor respeto a sus familiares, amigos, compañeros y a la institución en este momento tan doloroso”.
Camilo deja atrás una trayectoria breve pero intensa: 82 partidos con la camiseta de San Telmo y un compromiso absoluto con el club del que formaba parte desde las inferiores. Su fallecimiento golpea no solo al Candombero, sino a todo el ecosistema del ascenso argentino, donde cada historia forja sueños con esfuerzo y pasión.