Franco Colapinto no tuvo el arranque soñado en el Gran Premio de Bélgica de Fórmula 1. El piloto argentino, que compite para el equipo Alpine, cerró un viernes difícil en el mítico circuito de Spa-Francorchamps, tras un rendimiento que lo dejó lejos de los puestos de vanguardia tanto en la práctica libre como en la clasificación Shoot-out. En esta última instancia, decisiva para definir el orden de partida de la carrera Sprint, el pilarense quedó eliminado en SQ1 al marcar un tiempo de 1:43.587, que lo posicionó 19°, apenas por delante del joven Andrea Kimi Antonelli, quien se despistó con su Mercedes y no logró registrar una vuelta competitiva.
Lejos de conformarse con lo ocurrido, Colapinto fue autocrítico al bajar del auto y analizar su actuación ante los micrófonos. “Costó, no fue lo que queríamos. Hicimos un par de cambios después de la FP1 para intentar dar el pasito que necesitábamos porque estamos complicados. Pero fuimos en el camino incorrecto”, expresó con sinceridad en diálogo con ESPN. La frustración era evidente: el balance del auto, la falta de agarre y el sobrecalentamiento de los neumáticos traseros conspiraron contra su rendimiento.
“Hay trabajo por hacer”
En el análisis post jornada, Colapinto agregó: “Fue complicado, sobrecalentaba mucho las gomas de atrás. No fue fácil la segunda vuelta con la goma más caliente. Así que hay mucho trabajo por hacer”. A pesar del mal trago, el joven de 22 años mantuvo el enfoque en lo que viene: “A maximizar lo que tenemos para mañana e intentar mejorar un poco el paquete. Hay que dar el pasito para adelante, es lo que necesitamos”.
El equipo Alpine, por su parte, también difundió declaraciones del piloto argentino, en las que detalló las dificultades enfrentadas durante el día: “Hemos tenido problemas en general con el equilibrio y el agarre, y aunque hicimos algunos cambios para intentar solucionarlo, con el tiempo limitado de entrenamientos llegamos a la clasificación sin sentirnos del todo cómodos con el coche”.
Colapinto se mostró realista pero optimista de cara a lo que viene, especialmente considerando el clima cambiante de Spa, un factor que siempre puede alterar el orden establecido. “Esta pista es difícil, hay que tener confianza, especialmente a alta velocidad. La previsión meteorológica es incierta y, en un lugar como Spa, todo puede cambiar. Esperemos que eso nos dé una chance”, dijo esperanzado.
El contraste con su compañero
Mientras Colapinto sufría para encontrar ritmo, su compañero Pierre Gasly logró avanzar hasta la SQ3 y se mostró competitivo. El francés terminó sexto en la segunda tanda clasificatoria y se quedó con el octavo lugar final en la Shoot-out, mostrando que, si bien el Alpine no es un auto dominante, puede pelear más arriba. Esta diferencia expuso aún más las dificultades que enfrenta el argentino en su adaptación.
Durante la práctica libre, Colapinto había firmado un mejor registro de 1:44.847, quedando en el 19° puesto, a casi un segundo del propio Gasly, que fue 17° con 1:43.929. A lo largo de la sesión completó 21 giros con el A525, pero nunca pareció sentirse del todo cómodo con el comportamiento del monoplaza.
El Gran Premio de Bélgica continuará este sábado con la carrera Sprint (7:00 de Argentina), donde Colapinto deberá remontar desde el fondo. Más tarde, desde las 11:00, se disputará la clasificación tradicional, que determinará el orden de largada para la carrera principal del domingo, prevista a 44 vueltas y con inicio a las 10:00.
La incertidumbre climática será un factor clave en lo que queda del fin de semana. Spa es famoso por su clima impredecible y las condiciones mixtas podrían abrir una ventana para que Colapinto revierta su suerte. Para ello, deberá encontrar el balance justo en su auto, confiar en su instinto y aprovechar cualquier oportunidad que se presente.