Comenzó en Río Cuarto el juicio contra dos exintegrantes del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) de la ciudad Huinca Renancó, que están acusados de haber impedido el ingreso de Pablo Musse, el denunciante, a la provincia de Córdoba para visitar a su hija Solange Musse, durante la pandemia.
En ese momento, ella estaba internada en su casa, asistida con oxígeno y bajo cuidados médicos porque tenía un cáncer de mama avanzado, en fase IV. Días después, murió y él no pudo despedirse.
Los sospechosos son el médico Eduardo Andrada, que dirigía en ese entonces el Hospital de Huinca Renancó, y la asistente social Analía Morales, quien estaba al mando del puesto sanitario de la ciudad en agosto de 2020. Ambos manejaban el COE, organismo que se había hecho ese año para controlar accesos y coordinar medidas sanitarias.
Los dos están imputados por abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público debido a la decisión que tomaron de no dejar entrar a Pablo Musse a Córdoba. El hombre viajaba desde Neuquén para ver a su hija, que vivía en Alta Gracia y atravesaba el diagnóstico mencionado.
En la acusación, el fiscal sostiene que a Musse, quién estaba acompañado por una persona con discapacidad, lo obligaron a regresar a Plottier, una ciudad neuquina, encapsulado y escoltado por la policía. Por eso, no pudo despedirse de su hija. También, afirma que los funcionarios no hicieron caso a las normas que avalaban excepciones para situaciones “impostergables” como la que tenía la familia.
El debate es dado por el tribunal de la Cámara Criminal y Correccional de 1° Nominación de Río Cuarto, encabezado por el camarista Daniel Antonio Vaudagna, junto a Nicolás Rins, Diego Ortíz y jurados populares. El fiscal de Cámara, Julio Rivero, representa al Ministerio Público.
El estado de la causa hasta ahora
Ya declararon ambos acusados y se dio apertura a los alegatos. Luego de la audiencia, la asistente social habló con el noticiero local el doce. “Es muy difícil anímicamente para mí todo esto. Hace cuatro años que estamos en este proceso y yo estoy con terapia psicológica. Lamento como persona todo lo que sucedió con Solange, pero no tuve nada que ver con el caso”, aseguró.
El abogado de la querella, José Nayi, explicó que, si los imputados son condenados, podrían recibir prisión condicional y una inhabilitación para ejercer cargos públicos, pero no irán a la cárcel. También contó que hay una investigación judicial paralela en la que están acusados funcionarios a nivel provincial y nacional.
El papá de Solange también dio declaraciones a la prensa a la salida de la audiencia. “Esperamos mucho tiempo este día. Se lo prometimos a Solange y vamos a tener resultados positivos, van a ser condenados. Pero sabemos que acá hubo más responsables involucrados y vamos por ellos también”, expresó.
