La Comisión Internacional Independiente de Investigación de la ONU (COI) emitió un informe que denuncia a Israel por cometer un genocidio en la Franja de Gaza, con el propósito de "destruir a los palestinos" que habitan el territorio.
Este documento, presentado por la sudafricana Navi Pillay, expresidente del Tribunal Penal Internacional para Ruanda y presidente de la Comisión, señala directamente al primer ministro Benjamin Netanyahu, al presidente Isaac Herzog y al exministro de Defensa Yoav Gallant como responsables de promover estos crímenes.
"Es evidente que existe la intención de destruir a los palestinos de Gaza mediante actos que cumplen los criterios establecidos en la Convención sobre el Genocidio", afirmó Pillay al divulgar el informe, que llega casi dos años después del inicio del conflicto tras el ataque de Hamas en octubre de 2023.
La investigación sostiene que las declaraciones públicas de autoridades israelíes y las acciones militares evidencian que se cometieron actos genocidas con la intención de eliminar al grupo palestino en Gaza.
Según la COI, desde octubre de 2023, Israel ha perpetrado "cuatro de los cinco actos genocidas" definidos por la Convención de 1948: matar a miembros del grupo, causar daños físicos o mentales graves, someter al grupo a condiciones de vida que provoquen su destrucción parcial o total, e imponer medidas para impedir nacimientos dentro del grupo.
Pillay aseguró que los líderes israelíes mencionados "orquestaron una campaña genocida" contra la población palestina en Gaza.
La ofensiva israelí ha dejado un saldo devastador, con casi 65.000 muertos en Gaza, según cifras del Ministerio de Salud local, controlado por Hamas y consideradas confiables por la ONU. Por su parte, el ataque inicial de Hamas en Israel causó más de 1200 víctimas fatales y 250 rehenes.
Además, la mayoría de los habitantes de Gaza han sido desplazados al menos una vez, y la ONU declaró una hambruna en la zona mientras Israel intensifica su ofensiva sobre la Ciudad de Gaza.
El Ministerio de Exteriores israelí respondió rápidamente, rechazando "categóricamente este informe sesgado y mentiroso" y solicitando la disolución de la comisión investigadora. Según el gobierno israelí, el documento "se basa por completo en las falsedades de Hamas, blanqueadas y repetidas por otros".
Aunque la COI no tiene poder judicial, sus informes pueden aumentar la presión diplomática y servir como base para procesos en tribunales internacionales. La comisión firmó un acuerdo de cooperación con la Corte Penal Internacional (CPI) y compartió miles de datos, explicó Pillay.
"La comunidad internacional no puede quedarse en silencio ante la campaña genocida lanzada por Israel contra el pueblo palestino en Gaza. Cuando aparecen indicios y pruebas manifiestas de genocidio, la falta de acción para atajarlo equivale a complicidad", enfatizó la presidente de la comisión.
A pesar de que la ONU no ha calificado oficialmente la situación en Gaza como genocidio, varios líderes mundiales como Luiz Inácio Lula da Silva, Gustavo Petro, Recep Tayyip Erdogan y Pedro Sánchez ya han utilizado ese término. En mayo, el jefe de operaciones humanitarias de la ONU instó a los líderes globales a "actuar para impedir un genocidio".