Javier Milei reconoció por primera vez de manera explícita que Santiago Caputo, su principal asesor y estratega político, podría incorporarse formalmente al Gabinete nacional luego de las elecciones legislativas del 26 de octubre.
Durante una entrevista concedida a LN+, el mandatario aseguró que Caputo, conocido como “el arquitecto de la victoria libertaria”, tendrá “una función central en el Gabinete”. Al ser consultado sobre el cargo específico que podría ocupar, Milei evitó adelantar detalles para no perjudicar al posible funcionario: “La mejor forma de arruinar a un funcionario es anticipar que va a tener un cargo, lo mata”.
Caputo es considerado uno de los hombres de máxima confianza dentro de La Libertad Avanza y ha desempeñado un papel fundamental en la estrategia política del espacio, aunque hasta ahora no forma parte de la estructura formal del Estado.
En la entrevista, Milei también compartió sus expectativas para las próximas elecciones legislativas, señalando que un “buen resultado” sería que La Libertad Avanza obtenga un tercio de los diputados. Según explicó, ese número es clave para evitar que la oposición pueda revertir decretos o leyes impulsadas por el Gobierno.
En cuanto a la economía, el presidente reafirmó su objetivo principal: alcanzar la inflación cero para agosto de 2026. Explicó que esta meta se fundamenta en el “rezago de la política monetaria” y detalló: “Nosotros fijamos la cantidad de dinero a mitad del año pasado. Si el rezago es de 26 meses, para agosto del año que viene la inflación va a ser cero”.
Milei también criticó duramente la política económica previa, especialmente la estrategia keynesiana que, según él, fomentó el consumo a costa del ahorro: “El 30% de inflación me produce asco. La joda keynesiana de incentivar el consumo destruyó el ahorro”.
Sobre la reforma laboral
El presidente también se refirió a otro de los objetivos que se planea desde su Gobierno, aunque aclaró que no reemplaza al actual mecanismo, sino que el trabajador podrá optar entre uno y otro.
En ese punto, sostuvo que "las leyes son anacrónicas. Si la mitad de los trabajadores está en el sector informal, algo anda mal “, al tiempo que señaló que” en el nuevo régimen se van a sentar los trabajadores y las empresas. Si quieren seguir con el vigente lo pueden hacer, pero también pueden ir hacia uno más flexible. Depende de lo que negocien las partes. Es importante porque permite que gente que está en el sector informal pueda pasar al formal".