En un encendido discurso desde San Vicente, el gobernador bonaerense Axel Kicillof encabezó el acto por el Día de la Lealtad Peronista con duras críticas al presidente Javier Milei y a su política económica. Acompañado por Jorge Taiana, Juan Grabois y Verónica Magario, el mandatario provincial acusó al Gobierno nacional de “fracasar” y de “entregar la soberanía” en su vínculo con Estados Unidos.
“Fue a pedir la escupidera al Tesoro norteamericano. Nadie que está bien y tiene éxito necesita que lo salven cuatro veces”, lanzó Kicillof ante una multitud de militantes, en alusión a la reciente visita de Milei a Washington y su encuentro con el presidente Donald Trump. “Ni siquiera lo quisieron traducir porque no les importa ni una palabra de lo que dice”, ironizó.
Los salvatajes financieros
El gobernador también apuntó contra el ministro de Economía, Luis Caputo, al calificar como “salvatajes” los acuerdos financieros alcanzados por el Ejecutivo. “Llaman éxito a lo que es un síntoma de debilidad. Es un fracaso la política de Milei”, sentenció.
En un tramo de fuerte contenido simbólico, Kicillof reivindicó el legado del peronismo y cuestionó la narrativa oficialista que lo presenta como un obstáculo. “Le mienten a Trump. Le dicen que con un puñado de dólares se erradica una amenaza. Pero el peronismo no es una amenaza: en la Argentina, la dignidad se llama peronismo”, afirmó.
También celebró el resultado electoral del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires, donde el oficialismo retuvo la mayoría de los distritos. “Se rompió un mito. Milei decía que la crueldad y la exclusión tenían apoyo popular. Ese hechizo se rompió”, aseguró.
El acto en San Vicente se enmarca en una serie de actividades organizadas por el kirchnerismo para conmemorar el 17 de octubre. Una de ellas será una caravana hacia San José 1111, donde la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner cumple prisión domiciliaria. La presencia de Kicillof en esa movilización aún no fue confirmada. Con un tono combativo y apelando a la épica peronista, el gobernador bonaerense buscó posicionarse como uno de los principales referentes opositores al modelo libertario.
