El diputado habló sobre su rol en la cumbre no K del peronismo en Gualeguaychú. Las críticas al ministro Caputo, los límites del nuevo armado «federal» y su relación «personal» con Boudou.
Estos son los pasajes más destacados de la entrevista con el diputado Diego Bossio, tras la cumbre peronista de Gualeguaychú. En #BORDERPERIODISMO, por Radio Nacional, el programa que conduce María Julia Oliván los ábados de 7 a 10AM.
Sobre la reunión del peronismo no K en Gualeguaychú.
Tenemos que llegar al 2019 con una propuesta electoral y una acumulación en uno o varios dirigentes, pero tenemos que ir por etapas. Y esta primera tiene que ver con plantear ideas. Escuchar a la gente, qué es lo que pasa en las distintas zonas del país. Porque es la única forma de plantear una alternativa que la Argentina requiera. Necesitamos buenos dirigentes, que sepan escuchar y que planteen alternativas. Creemos que hay muchas cosas que mejorar. Debemos dar el salto que la Argentina requiere.
La expresión política en Gualeguaychú representa la primera minoría del Senado, de los gobernadores y del bloque Federal de diputados, al que se sumaron las expresiones de Sergio Massa, con quien venimos coincidiendo, al margen de diferencias circunstanciales.
Este espacio tiene como lógica el centro, un peronismo moderno, un capitalismo que apuesta al desarrollo y la idea de no oponerse por oponerse sino utilizar el diálogo como una virtud en la democracia. Por esto vamos a trabajar fuerte en los últimos meses.
En 15 meses cambiaron muchas cosas en la Argentina. Ayer iniciamos un camino que tiene que ver con la discusión en términos de ideas y de proyectos a futuro. Nosotros hemos sido claro y no mezclamos cuestiones personales. Estamos discutiendo diferencias en metodologías políticas. Pero cuando uno dice dialogar, dialoga con todos, no sólo con el Gobierno. El límite del diálogos son las actitudes patoteriles, la descalificación, la adjetivación que no corresponde. Nosotros hemos marcado un espacio que quiere discutir ideas, quiere ser profesional, convocar a los mejores e ir hacia adelante. Estamos abocados a construir una alternativa en el futuro. Cuando Pichetto dice “sin Cristina y sin la Cámpora” está marcando un camino. Tenemos dirigentes, después si es o no una PASO, se verá.
Sobre la visita de Caputo en el Senado y el papelito.
No me quiero quedar en la anécdota del papelito porque eso no resuelve los problemas de la Argentina. Yo quiero discutir el tema de la deuda, que es un tema preocupante. Y en eso, las reglas son claras; tiene que discutirse en el Congreso.
Vamos a señalar que Caputo vuelva, no solo a la comisión, sino en el ámbito del Congreso y explique lo que no explicó. Un ministro tiene que estar a disposición, sobre todo el de Finanzas, que toma deuda por el país, porque eso es una facultad delegada. Resolvimos el tema de los holdouts pero no podemos vivir de prestado todo el tiempo.
La discusión tiene que darse en el marco de la institucionalidad, la racionalidad y la prudencia. Con firmeza pero sin patoterismo. Las actitudes patoteriles no conducen a nada y forman parte del pasado en Argentina. La verdad que no pudimos participar del debate por esto. Independientemente de ello, no es forma de expresarse con un papelito por parte de un ministro.
Sobre las políticas económicas de Cambiemos
El Gobierno venía a resolver el problema del déficit y lo único que hizo es agravarlo. Antes era 4,5 puntos del PBI y ahora son 6,1 porque los intereses se pagan. Hay que encontrar un camino, entre déficit e inflación, porque así, en mi consideración, es insostenible.
El Gobierno de Macri no le encuentra el rumbo a una Argentina que ellos creyeron que tenía problemas que iban a poder resolver. No está ocurriendo.
Sobre su relación con Amado Boudou
Me lo encontré el año pasado y hablé personalmente en una cuestión social. Y tuve un mensajito de texto cuando salió de la cárcel hace unos días. Tengo con él una relación personal, no política. Su situación judicial debe resolverla la Justicia y él debe estar a disposición. Pero en términos generales, me parece que la situación de las prisiones preventivas es delicada y compleja.
