El expresidente Alberto Fernández irrumpió en el debate sobre el futuro del peronismo y los posibles liderazgos tras la derrota electoral de octubre, destacando enfáticamente la figura del gobernador bonaerense, Axel Kicillof, de cara a las elecciones presidenciales de 2027.
En un análisis de la situación interna del partido, Fernández calificó a Kicillof como "un buen gobernador, un tipo muy inteligente, muy preparado y un candidato" con proyección nacional. Sin embargo, lamentó que la fragmentación interna esté perjudicando al principal referente del espacio.
Críticas a los "aliados" de Kicillof
Desde el streaming Blender, el exmandatario se refirió a las tensiones que atraviesa el gobernador de la provincia de Buenos Aires, y apuntó indirectamente a la disputa que mantiene con el sector de Cristina Fernández de Kirchner.
"Tiene una situación de adversidad terrible ahora, porque el Gobierno (nacional) hace lo posible para que le vaya mal", sostuvo Fernández. Pero el señalamiento más duro fue hacia adentro: "Lo que yo no me perdono es que nosotros ayudemos al Gobierno haciéndosela más difícil a Axel".
Para Fernández, las disputas dentro del peronismo tienen consecuencias que trascienden lo personal, incidiendo en el funcionamiento institucional y complicando la gobernabilidad en el principal distrito del país.
Al repasar la baraja de presidenciables peronistas para 2027, el expresidente no se limitó a Kicillof. También incluyó al exministro de Economía, Sergio Massa, a quien definió como "una de las personas que mejor conoce el Estado nacional".
La lista se completó con Jorge Capitanich, exgobernador de Chaco, quien, según Fernández, "acaba de hacer una elección extraordinaria". El exministro de Justicia, Martín Soria, y su hermana María Emilia Soria, intendenta de General Roca (Río Negro). Figuras de su entorno cercano, como Gabriel Katopodis y Jorge Ferraresi, a quienes elogió como "impresionantes funcionarios" y potenciales "extraordinarios presidentes".
Nuevas negaciones por la causa de violencia de género
En otro tramo de la entrevista, Fernández volvió a referirse a la denuncia por presunta violencia de género presentada por Fabiola Yáñez. Negó de manera categórica haber ejercido violencia y relativizó la denuncia, afirmando que el episodio mencionado habría ocurrido antes de que Yáñez intentara abandonar la residencia de Olivos, cuando, según su versión, "ni siquiera estaba embarazada de su hijo".



