En un contexto de crecientes tensiones internas y movimientos de legisladores hacia La Libertad Avanza (LLA), el expresidente y titular del PRO, Mauricio Macri, convocó a los principales dirigentes de su partido a una cumbre decisiva. El Consejo Nacional del PRO se reunió en la sede de la calle Balcarce para debatir el futuro inmediato de la fuerza, la compleja relación con el gobierno de Javier Milei y, especialmente, la estrategia a seguir de cara a las elecciones presidenciales de 2027.
El encuentro, el primer foro formal del partido tras las elecciones legislativas, buscó reordenar las filas ante las divisiones generadas por el apoyo al Ejecutivo y la constante presión de LLA para una eventual fusión o absorción.
Críticas y proyecto 2027
Según trascendió tras la reunión, Macri reafirmó la posición ambigua del partido: si bien se mantiene el apoyo a las reformas estructurales que impulsa el Gobierno en el Congreso —necesarias, por ejemplo, para la aprobación del Presupuesto 2026—, también se decidió trazar una línea clara de independencia institucional.
Macri insistió en que el PRO debe mantener su identidad, la cual definió como una "visión liberal completa" marcada por la "libertad de expresión, el respeto a las instituciones" y, fundamentalmente, por ser un "partido de gestión" que cree en el trabajo en equipo y el detalle.
"Nosotros vamos a tener un bloque de diputados del PRO como lo tuvimos los últimos dos años, que represente las ideas y los valores del PRO”, aseguró el expresidente, negando así la extinción de su partido a pesar de las alianzas.
La principal discusión que sobrevuela la cumbre es el rol del PRO como opción de alternancia en 2027. A pesar de los coqueteos con el oficialismo, la cúpula del partido busca consolidar una opción competitiva que no quede diluida bajo la bandera libertaria.
Esta urgencia se ve exacerbada por la fuga de varios legisladores y dirigentes al bloque libertario, un fenómeno que genera fuerte malestar. La reunión se celebró en un clima de debate sobre si la cooperación parlamentaria debe ser total o si el PRO debe empezar a distanciarse para consolidar una base electoral propia de cara a las próximas contiendas.
El encuentro sirve como un claro mensaje al Ejecutivo: el PRO respaldará las leyes que considere necesarias para la gobernabilidad, pero la existencia de un proyecto propio de cara a 2027 no está en discusión.



