Luego de semanas de rumores, el Banco Central confirmó que en el mes de octubre y antes de las elecciones, el Gobierno usó un swap con el Tesoro de Estados Unidos por US$2510 millones, un poco más abajo de la cifra de US$2700 millones que preveía el mercado.
Sin embargo, la versión había sido confirmada por el propio secretario del Tesoro de Estados Unidos Scott Bessent, aunque la cifra no se había difundido hasta el momento, pero el Banco Central confirmó que en sus planillas figuran los US$2510 millones como un pasivo a menos de un mes.
Cómo fue la operación según una consultora y Bessent
En primer lugar, vale recordar que el Tesoro estadounidense adquirió pesos y luego compró un bono local. Luego de eso, al activarse el swap, nuestro país entregó pesos y, a cambio, recibió dólares. Sin embargo, como Estados Unidos ya había colocado su divisa en el mercado y retenidos pesos, el Gobierno argentino reconoció esa obligación en moneda extranjera.
En ese sentido, desde la consultora Outlier esa operatoria permitió “darle salida a Estados Unidos. contra reservas del BCRA, vía un pasivo en moneda extranjera, evitando una liquidación en el mercado cambiario”.
Por su parte, Bessent había explicado ante una cadena televisiva de su país que "el gobierno de Estados Unidos ganó dinero. Le prestamos dinero a un gobierno para estabilizarlo durante una elección, uno de nuestros grandes aliados en Latinoamérica”, señaló el funcionario de la Casa Blanca.
Además, en Outlier señalaron que “el movimiento más consistente en el pasivo del BCRA con el desarme de la mencionada letra es el incremento por similar monto en ‘otros pasivos’. Dado que en otros pasivos se contabilizan los swaps, podemos especular que la salida se dio contra la activación de un tramo del swap con Estados Unidos por un valor equivalente”.
“Es una forma de darle salida (a EE.UU.) contra reservas del BCRA, vía un pasivo en moneda extranjera, evitando la salida vía mercado”, concluyeron desde la mencionada consultora.



