El tratamiento del proyecto de reforma laboral ya comenzó a demorarse y se trabajaría recién desde la semana que viene en comisión, pese a que Patricia Bullrich quería empezar a tratarlo en el Senado antes del fin de semana.
Lo cierto es que la iniciativa no llegó aún a la Cámara alta porque no fue firmada por Javier Milei, quien está regresando al país desde Oslo, Noruega. En paralelo todavía se estarían incluyendo novedades en el documento.
El pasado martes, tras la presentación del informe final del Consejo de Mayo, se esperaba conocer la letra chica y el articulado del proyecto de modernización laboral. "Lo antes posible queremos que se trate", dijeron desde el Senado. Pero aún no se subió el texto completo a la página oficial del Gobierno.
Trascendió que está en marcha una revisión de la letra chica en medio del rechazo sindical, e incluso se dice que la demora en la presentación del proyecto obedecería a unos contactos con gremialistas que se están dando por estas horas para rever algunos puntos de la ley.
Cuando la reforma laboral arribe a la Cámara Alta, Victoria Villarruel deberá convocar a todos los jefes de bloque para terminar de definir la conformación de las comisiones. Se espera que eso ocurra a principios de la semana que viene, cuando ya estén definidos los distintos interbloques en el recinto.
Por otro lado, el oficialismo realizó modificaciones con respecto a las jornadas de trabajo, y al respecto incluyó el concepto de “banco de horas”. Este cambio tendría el objetivo de lograr que el empleador y el trabajador acuerden voluntariamente un régimen de compensación de horas extras.
“Se podrá utilizar el banco de horas de modo de compensar la mayor jornada de algún día con la menor de otro, siempre y cuando no se supere el máximo legal de la jornada semanal, o la que estipule el régimen laboral específico aplicable, ya sea, ley especial y/o convenio colectivo de trabajo”, indicó el borrador de la modernización laboral que está circulando.



