Con el cierre de listas previsto para el 17 de agosto, la reciente confirmación de la alianza entre La Libertad Avanza (LLA) y el PRO encendió una intensa danza de nombres para los cargos legislativos nacionales. Sin embargo, mientras se multiplican las versiones, las definiciones oficiales todavía brillan por su ausencia. Tanto en la Ciudad de Buenos Aires como en la provincia homónima, reina el silencio estratégico. Un pacto tácito parece mantener selladas las listas mientras se desarrollan reuniones febriles entre dirigentes del oficialismo y del partido fundado por Mauricio Macri.
La expectativa se concentra en torno a quiénes serán los protagonistas que encabezarán las boletas que intentarán consolidar la mayoría parlamentaria que Javier Milei necesita para avanzar en la segunda etapa de su agenda de reformas.
Qué nombres sobrevuelan para las listas
Uno de los primeros nombres que logró el visto bueno del presidente fue el de Patricia Bullrich. La ministra de Seguridad, que supo ser candidata presidencial y pieza clave en el armado político libertario, lideraría la lista de senadores por la Ciudad de Buenos Aires. Desde la Casa Rosada aseguran que su perfil combativo y su alta imagen positiva dentro del electorado porteño la convierten en una carta fuerte para enfrentar al kirchnerismo.
Para acompañarla en la boleta, surgieron otros posibles nombres. Uno de ellos fue Federico Furiase, actual director del Banco Central, aunque fuentes cercanas confirmaron que no será finalmente de la partida. En cambio, cobra fuerza la figura de Sabrina Ajmechet, diputada del PRO, cuyo mandato finaliza este año y que podría compartir fórmula con Bullrich.
En paralelo, también se barajan opciones para la lista de candidatos a diputados por CABA. Dentro del PRO, varios perfiles suenan como posibles representantes del acuerdo: Fernando de Andreis, exsecretario General y asesor estratégico en el Gobierno porteño; Jimena de la Torre, actual consejera de la Magistratura; y Hernán Iglesias Illia, periodista, fundador de Revista Seúl y exfuncionario durante la gestión de Mauricio Macri.
Otra figura con proyección es Pilar Ramírez, legisladora porteña y una de las personas de mayor confianza de Karina Milei en la Ciudad. Aunque no hay confirmación oficial, su nombre circula con fuerza como una de las posibles incorporaciones a la Cámara Baja.
Mayor incertidumbre en territorio bonaerense
En la provincia de Buenos Aires, donde también se selló una alianza entre el partido de gobierno y el macrismo, el escenario es aún más incierto. Aunque se da por hecho que José Luis Espert repetirá como candidato, las incógnitas en torno a los acompañantes en la lista se multiplican.
Si bien los armadores de LLA niegan que la boleta ya esté definida, confirmaron que recibieron propuestas concretas por parte del PRO, que aspira a colocar al menos tres nombres en los primeros lugares. Entre los que suenan con más fuerza están Florencia de Sensi, Diego Santilli y Alejandro Finocchiaro, todos actuales legisladores con recorrido y proyección.
Sin embargo, como ya sucedió en la capital, la lógica que se impondría en Buenos Aires apunta a una boleta encabezada por candidatos puramente libertarios, con el PRO ocupando los lugares que le asigne la cúpula de LLA. Esta estrategia permitiría al oficialismo asegurar el control del armado, consolidar su identidad política y evitar fugas internas en un momento donde la gobernabilidad futura dependerá, en gran parte, del número de bancas obtenidas en el Congreso.