El presidente Alberto Fernández subió un vídeo en redes para destacar sus logros en estos 1000 días de gestión: «Lo dije el primer día: mi obligación es con los últimos. Nos tocaron muchas adversidades, pero les hicimos frente y nunca bajamos los brazos. Tengo la tranquilidad de no haber faltado a mi palabra», escribió Fernández en un tweet.
El corto contó con fragmentos de sus discursos e imágenes en eventos que acompañaron los textos que ponderan los programas sociales como Potenciar Trabajo, la adquisición de vacunas contra el coronavirus, Repro, ATP y la nueva Ley de Movilidad.
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En alusión a la pandemia, el Jefe de Estado destacó la adquisición de vacunas, pero también se lamentó: «Nos tocaron tiempos difíciles», sin embargo destacó, «nosotros nunca bajamos los brazos y nos importa mucho nuestro pueblo«.
DÍA 1001
Este jueves el Mandatario se hizo presente en Santiago del Estero bajo el marco de entrega de viviendas, fue allí donde también habló del transcurso de su mandato, y de sus recientes 1000 días cumplidos.
«Estamos transitando 1000 días de gestión en el Gobierno, estos son momentos donde podemos llamarnos a la reflexión y ver cómo nos fue, qué pasó, qué hicimos bien y qué hicimos mal», analizó el Presidente al iniciar su discurso.
En medio de su alusión Alberto se desvió al ver un cartel que decía «basta de odio» y rememoró sus épocas como Jefe de Gabinete de Néstor Kirchner. En ese sentido destacó que, al conocer a Gerardo Zamora (gobernador de Santiago del Estero) no entendía por qué decía estar en contra de las ideas del kirchnerismo: «Él es un radical y sigue siéndolo hasta el día de hoy, pero tiene esa mirada integradora que muchos tenemos en Argentina…», en esta misma línea el mandatario se refirió a los discursos de odio y cómo estos deben dejarse de lado en la política nacional.
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El jefe de Estado llamó a la unión y comentó: «Lo que quiero demostrar es que, para que podamos lograr estos resultados, hace falta que podamos unirnos en objetivos comunes. Tratar de profundizar los puntos de acuerdos y tratar de minimizar los puntos de diferencias. El destino al que queremos llegar es exactamente el mismo, qué importa si es radical, si es oficialista o no es oficialista. Lo que importa es a dónde queremos ir. Así se avanza», reforzó Alberto en su discurso anti odio.
Seguidamente se refirió al mandato de Mauricio Macri como, «cuatro años perdidos y desperdiciados»: «Mucha de la obra pública que había encarado Cristina (Kirchner) se dejó abandonada. Cuando nosotros llegamos el 70% de las obras públicas estaban paralizadas«.
«Habían 10 mil casas que no las terminaron de construir únicamente porque las había dejado Cristina», cuestionó el Presidente.
Al referirse a la pandemia, Fernández comentó: «No fueron días fáciles, estos 1000 días, fueron días muy traumáticos. La pandemia por coronavirus fue «impiadosa» y se «llevó millones de vidas en el mundo». También se refirió a las nuevas generaciones como «sobrevivientes de un tiempo de horror y de mucha incertidumbre». Finalmente, recordó la vacunación, pero antes de explayarse, deslizó, «no quiero ni recordarlo…fuimos muy atacados», cerró.
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