El Gobierno de Javier Milei encendió todas las alarmas luego de que el banco JP Morgan dé a conocer un informe con críticas a la política económica argentina.
Mediante un paper denominado "Tómandose un respiro", los principales economistas recomendaron “dar marcha atrás” con los bonos argentinos, es decir las Letras de Capitalización (Lecaps) que vencen en 50 días.
Cuáles son las razones que esgrime el banco
El informe analizó la situación económica y financiera argentina de los últimos meses. A diferencia de abril cuando la salida del cepo, la entidad recomendó subirse al ‘carry trade’ -es decir, vender dólares ante la expectativa de un tipo de cambio estable- ahora recomiendan salirse del mismo.
Es que, de acuerdo con lo que vaticinaba y prometía el Gobierno en ese momento ese tipo de cambio estable iba a provocar que el dólar llegue a los $ 1.000 y eso iba a servir de impulso para comprar bonos con plazo hasta el 15 de agosto de 2025. De esa forma, se podría obtener una tasa de interés superior a la inflación y el movimiento del dólar. Sin embargo, ahora puso un freno y aconsejó esperar.
Según el JP Morgan, "mantenemos una visión constructiva sobre las perspectivas de mediano plazo de Argentina, considerando la desinflación y el avance fiscal. Sin embargo, con el pico de ingresos agrícolas ya atrás, la probabilidad de salidas continuas por turismo, posibles ruidos electorales y cierto bajo rendimiento del peso que motivó intervenciones cambiarias en el dólar futuro, preferimos dar un paso atrás y esperar mejores niveles de entrada para volver a posicionarnos".
Los principales motivos que llevaron al JP Morgan a poner el freno de mano
En primer lugar, el comportamiento del peso, que fue el peor de los últimos dos meses en los mercados emergentes.
Otro punto que desde Wall Street miran con atención es la proximidad de las elecciones y el temor de un posible regreso del kirchnerismo, a pesar de que el Gobierno viene insistiendo con una baja del riesgo país, que hoy se ubica en los 714 puntos.
También hay cierto temor por el aumento del rojo externo, a pesar de la tranquilidad que llevó el ministro de Economía, Luis Caputo quien aseguró que el déficit de cuenta corriente en el primer trimestre es "absolutamente razonable”.
También miran con atención el salto del tipo mayorista del dólar del 4% , la baja de retenciones a la soja que provocará menos ingresos de la moneda norteamericana y la intervención sobre el dólar futuro que hace plantear si el dólar oficial en $1200 está bien.
Sin embargo, JP Morgan aseguró que “con la estacionalidad positiva llegando a su fin y las elecciones acercándose, preferimos tomar ganancias y esperar mejores niveles de entrada para reanudar operaciones alcistas en los mercados locales", al tiempo que esperan que se acelere la desinflación.