Con las elecciones bonaerenses cada vez más cerca, previstas para el 7 de septiembre y con cierre de listas en julio, el escenario político en la provincia de Buenos Aires se encuentra en plena ebullición. Dentro del armado libertario liderado por Javier Milei, se barajan distintas posibilidades de pactos electorales, no solo con el PRO sino también con sectores del radicalismo. Sin embargo, estas conversaciones avanzan a ritmos desiguales y con diferentes protagonistas involucrados.
En los últimos días, se produjo un importante acercamiento con el PRO, impulsado por la derrota que sufrió el macrismo en la Ciudad frente a los libertarios, lo que obligó a Mauricio Macri a habilitar un vínculo directo entre Karina Milei y Cristian Ritondo. En ese marco, los libertarios fortalecieron sus lazos con los dirigentes amarillos, en especial desde el ala operativa coordinada por Sebastián Pareja, una de las figuras de mayor confianza de Karina Milei en territorio bonaerense. No obstante, la posibilidad de sumar al radicalismo aún se encuentra en una etapa incipiente y con varios matices internos.
Reunión privada
Uno de los actores centrales de esta estrategia es Santiago Caputo, principal asesor político del Presidente, quien se reunió en privado con Maximiliano Abad, líder del radicalismo en Buenos Aires y una figura clave para cualquier acercamiento institucional. El encuentro ocurrió hace tres semanas y contó también con la presencia de referentes libertarios como Agustín Romo y Nahuel Sotelo, mientras que del lado radical participó Diego Garciarena. Aunque el contacto fue discreto, se considera un paso significativo en la búsqueda de un frente común.
Pese a este acercamiento, desde el entorno más cercano a Karina Milei niegan que exista un diálogo formal abierto con la UCR en este momento. Según afirman, no hubo aún gestos concretos por parte del radicalismo que activen una relación orgánica, a diferencia de lo que ocurrió con el PRO, cuyos dirigentes, como Ritondo y Santilli, tomaron la iniciativa en su momento. “Estamos dispuestos a hablar con todos los que quieran sumar”, repiten desde el comando libertario, dejando la puerta abierta pero sin compromisos.
José Luis Espert, quien se perfila como el posible candidato de La Libertad Avanza en Buenos Aires, ha sido hasta ahora el único que manifestó abiertamente el deseo de formar una coalición más amplia. Declaró que ya hay un acuerdo con el PRO para competir juntos y que se están manteniendo conversaciones con otros sectores bajo la idea de construir un “frente anti miseria, anti kirchnerista”. Sin embargo, desde su propio espacio le bajaron el tono a esas declaraciones, advirtiendo que hay demasiadas voces hablando sin información precisa, lo que genera confusión.
Dentro del oficialismo, hay quienes valoran particularmente la figura de Abad, a quien consideran un interlocutor viable en la UCR. Señalan que el radicalismo del interior bonaerense tiene un perfil más conservador, alejado de la línea progresista de la Ciudad, y más cercano a las propuestas del Gobierno nacional. Incluso le reconocen a Abad su acompañamiento en varios temas clave, a pesar de su participación en recientes manifestaciones universitarias.