El calendario electoral avanza y el engranaje administrativo detrás de las elecciones legislativas del 26 de octubre ya está en marcha. Esta semana, el Gobierno nacional formalizó los mecanismos de apoyo a las agrupaciones políticas que competirán por bancas en el Congreso, en cumplimiento de las leyes que regulan el funcionamiento y financiamiento de los partidos.
La resolución, publicada en el Boletín Oficial, establece los criterios para la asignación de recursos destinados a las campañas de diputados y senadores en todo el país. La Dirección Nacional Electoral será la encargada de coordinar la distribución entre las fuerzas participantes, según lo previsto por la normativa vigente. También tendrá la facultad de aplicar sanciones en caso de incumplimientos, en línea con lo que establece la Justicia Nacional Electoral.
¿En que se apoya el financiamiento?
La cifra, publicada en el Boletín Oficial mediante la Resolución 375/2025, representa uno de los desembolsos más altos en aportes públicos para comicios legislativos desde la sanción de la Ley de Financiamiento de los Partidos Políticos. El Estado cubrirá:
-$8.815.610.700,67 para candidaturas a Diputados Nacionales
-$4.407.805.350,33 para candidaturas a Senadores Nacionales
-En total, serán destinados más de $13.200 millones.
El procedimiento se apoya en el marco legal que rige desde hace años el financiamiento político, y que reconoce al Estado como garante de condiciones mínimas de competencia democrática. La resolución fue firmada por la Vicejefatura de Gabinete del Interior, que también certificó la disponibilidad presupuestaria y la intervención de las áreas jurídicas correspondientes.
La convocatoria a elecciones fue establecida por decreto, y contempla la renovación de 127 bancas en la Cámara de Diputados y 24 en el Senado. La distribución de escaños responde al esquema de recambio parcial que establece la Constitución: la cámara baja se renueva por mitades cada dos años, mientras que la alta lo hace por tercios.
En esta ocasión, todas las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires elegirán diputados, y ocho distritos renovarán sus senadores. El sistema D’Hondt será utilizado para asignar los lugares en función de los votos obtenidos por cada lista en cada jurisdicción.
El proceso electoral de este año también se caracteriza por la coexistencia de elecciones nacionales y provinciales. Algunas jurisdicciones decidieron desdoblar sus comicios locales, mientras que otras mantendrán la unificación de fechas. En ambos casos, el objetivo es el mismo: renovar la representación política y actualizar los cuerpos legislativos en función de la voluntad popular. Con la maquinaria institucional en marcha, el país se prepara para una jornada que no solo definirá nombres, sino también el equilibrio de fuerzas en el Congreso.