El pasado sábado al mediodía, Michelle Iman Schmukler y su bebé de 8 meses sufrieron un ataque antisemita en el patio de su departamento en Palermo.
Tras el violento episodio, la pareja realizó la denuncia correspondiente y el Ministerio de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires intervino. El agresor, un hombre de 39 años, fue trasladado para someterse a una evaluación psiquiátrica, cuyos resultados aún no fueron revelados. La madre del imputado informó que trasladó a su hijo a otro domicilio.
Este lunes, la causa quedó a cargo de la fiscalía especializada en materia de Discriminación N°13, dirigida por la fiscal Paluch. Sin embargo, Michelle y su pareja buscan que la acusación sea más grave que un simple caso de discriminación.
“No es discriminación, porque si el fierro caía un metro a la izquierda estamos hablando de una situación distinta”, explicaron los padres. Ambos declararon ante la fiscalía para solicitar que se agrave la imputación contra el hombre que los atacó.
El esposo de la influencer enfatizó que la peligrosidad del agresor no se reduce con un cambio de domicilio: “Si mañana lo obligan a retirarse del edificio e ir a otro barrio, le va a pasar a otro vecino y a otro hijo. Si tiene mejor puntería se van a lamentar de no haber hecho algo más”.
Michelle relató el miedo que sienten al convivir con el agresor en el edificio: “Tenemos miedo porque sigue suelto. Tengo que mirar por la mirilla para ver que no esté del otro lado de mi departamento”. A pesar de contar con custodia policial las 24 horas, teme que el atacante pueda volver.
Los vecinos del edificio se solidarizaron con la familia, conscientes de que la violencia podría afectar a cualquiera. Michelle recordó que hace cinco años el mismo hombre le lanzó un escupitajo y la insultó con gritos antisemitas, aunque no realizó la denuncia por miedo. Ahora considera que fue un error, ya que el agresor tiene un claro odio hacia los judíos.
También expresó su decepción por la falta de comunicación de la familia del agresor: “Nadie de la familia no nos dijo nada, eso también nos molestó”.
La influencer alertó sobre una creciente “espiral antisemita” en el país, mencionando incidentes recientes como el acontecido en la escuela Humanos. Además, señaló que tras la difusión del ataque recibió mensajes con la bandera de Palestina, reflejando un clima de hostilidad: “La gente está buscando cualquier excusa para agarrársela con los judíos y decirnos ´ahora sí te puedo pegar´”.
Finalmente, Michelle contó que tuvo contacto con el presidente Javier Milei, quien le manifestó estar “muy conmovido por lo sucedido” y comprometido a trabajar para que el caso se resuelva lo antes posible.