El ministro de Economía, Luis Caputo, rechazó las críticas al Gobierno nacional por el saldo negativo en la cuenta corriente, que superó los 5 mil millones de dólares en deuda externa durante los primeros meses del año, según informó el INDEC durante la semana. Caputo justificó los números rojos y aseguró que es una señal del buen rumbo económico del país.
En el congreso Somos Pymes, en La Rural, Caputo explicó y defendió el déficit de cuenta corriente de 5.200 millones de dólares que posee el Gobierno Nacional. "Esto es algo absolutamente razonable y hasta sano para una economía que va creciendo al 6%", afirmó Caputo luego de las advertencias de diversos economistas, como Domingo Cavallo, Martín Rapetti o Ricardo Arriazu, que en las últimas semanas cuestionaron a la gestión del Banco Central de la República Argentina (BCRA) por los saldos rojos en su cantidad de divisas.
Durante su exposición, Caputo vinculó la falta de reservas con el incremento de la inflación y el crecimiento de la actividad comercial. "El segundo punto que quería explicar es que este déficit ya no financia más al rojo del sector público, sino que es el déficit del privado", insistió el titular de Hacienda.
"Es algo absolutamente razonable para un país que estaba descapitalizado y creciendo al 31,8%. Era obvio que iba a pasar", insistió Caputo. El ministro defendió el nuevo rumbo que tomó el Ministerio de Economía y el Gobierno tras la firma de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y destacó la apreciación del peso respecto a los dólares. "Argentina tuvo déficit fiscal en 113 de los últimos 124 años. Evitamos una crisis y aplicamos el ajuste en el sector público", subrayó.
Durante su discurso, Caputo mencionó algunas de las medidas dirigidas a las pymes que impulsó su Ministerio, entre ellas la suspensión de embargos durante todo 2024, la baja de intereses del AFIP, y la eliminación o reducción de derechos de exportación sobre 4.400 productos. En este sentido, el titular de Hacienda se dirigió a los titulares de las pymes y enfatizó: "El Gobierno no quiere realizar distinciones entre grandes, pequeñas o medianas empresas, o sectores específicos. Queremos crear condiciones para que cualquiera se pueda desarrollar".
En este sentido, el titular de Hacienda cuestionó a los empresarios que "todavía no cambiaron el chip y esperan condiciones devaluatorias para presentar sus proyectos" y a los gobernadores provinciales por "aumentar los impuestos para generar mayor recaudación". Según Caputo, el Gobierno busca reducir impuestos a través de la desregulación de la economía y la apertura del mercado. "Si el país crece al 6% anual durante seis años, vamos a devolverle al privado más de 420 mil millones de dólares en reducciones impositivas", indicó.