La separación de Gimena Accardi y Nicolás Vázquez, tras 18 años juntos, dejó de ser un simple anuncio para convertirse en una historia con múltiples capítulos y revelaciones. Ambos habían comunicado su ruptura con respeto y sin escándalos, pero el paso del tiempo mostró que la verdad era más compleja.

En el programa LAM, Ángel de Brito reveló que Nicolás Vázquez descubrió que Gimena mantenía una relación con otra persona durante un tiempo prolongado, algo que ella terminó reconociendo. Según el conductor, el actor encontró pruebas que confirmaron esta situación.

El nombre de Andrés Gil, compañero de elenco de Accardi y pareja de Candela Vetrano, se viralizó rápidamente en redes sociales, alimentando aún más las especulaciones. La situación se tensó cuando Accardi le dio “me gusta” a una publicación romántica de Gil dirigida a Vetrano, lo que reforzó las sospechas sobre un vínculo entre ellos.

Por su parte, Nicolás Vázquez atravesó un momento muy difícil, llegando a llamar llorando a Yanina Latorre para buscar apoyo. Según Ángel de Brito, el entorno íntimo de ambos estaba al tanto de las tensiones, que incluso afectaban los equipos de trabajo de sus respectivas obras teatrales.

La confesión

Finalmente, Gimena Accardi habló en el programa OLGA, donde reconoció su responsabilidad en la crisis: “En 18 años uno comete errores. Yo cometí uno. Me mandé una cagada malísima y me hago cargo de una parte de lo que se dijo ayer. Porque sí es cierto lo que se dijo ayer la mitad de las cosas, y la otra mitad no, y de eso no me voy a hacer cargo”.

La actriz explicó que ya estaban atravesando un año de crisis con idas y vueltas y que, aunque su error no fue la causa principal, sí fue el detonante final: “Del otro lado hubo entendimiento, me perdonó, me miró los ojos y me dijo ‘Yo te sigo amando. Esto a vos no te define’”.

Con estas declaraciones, Accardi desmontó la imagen idealizada de una pareja perfecta y mostró que la ruptura se debió a una combinación de desgaste, conflictos prolongados y un error que terminó por quebrar lo que quedaba de la relación.