El presidente Javier Milei encabezó este lunes una reunión en Casa Rosada con una figura clave del gobierno de Donald Trump: la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, artífice de la estrategia migratoria de deportaciones masivas en ese país. “La dama de hierro”, como se la conoce. El encuentro marcó un paso importante en la relación bilateral: la firma de una declaración de intención para que Argentina se incorpore al Programa de Exención de Visas (Visa Waiver Program), lo que podría permitir que ciudadanos argentinos ingresen a Estados Unidos sin necesidad de visado.
El anuncio fue acompañado por un comunicado oficial en el que se explicó que este es el primer paso formal de un proceso complejo que podría llevar a millones de argentinos a viajar por turismo o negocios a Estados Unidos por hasta 90 días sin visa, si se cumplen una serie de estrictos requisitos internacionales.
Qué implica el ingreso al Visa Waiver Program
La visita de Noem también incluyó una reunión previa con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, con quien firmó acuerdos de cooperación en seguridad, en presencia del canciller Gerardo Werthein. Participaron también el embajador argentino en Washington, Alejandro Oxenford, y autoridades del Departamento de Seguridad Nacional estadounidense.
La inclusión de Argentina en este selecto grupo de países, actualmente 42 en total, permitiría a sus ciudadanos acceder a Estados Unidos solo con una autorización electrónica (ESTA), que se tramita online y se aprueba hasta 72 horas antes del viaje. Sin embargo, desde el Gobierno aclararon que la admisión al programa está sujeta a un proceso riguroso que exige altos estándares de seguridad migratoria y tecnológica, como la implementación de pasaportes electrónicos, sistemas biométricos y mecanismos avanzados de control fronterizo.
Según el comunicado de la Oficina del Presidente, este paso inicial “reafirma el excelente vínculo entre los presidentes Milei y Trump”, sostenido por “un marco de confianza mutua” y una agenda compartida en materia de seguridad, lucha contra el crimen transnacional y cooperación internacional.
El acuerdo también incluye un Memorando de Entendimiento entre el Ministerio de Seguridad argentino y varias agencias estadounidenses, como el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y la División de Operaciones de Ejecución y Expulsión. El documento propone la creación de un grupo de trabajo bilateral para identificar prófugos en territorio argentino, y la apertura de un canal oficial para intercambiar información sobre nacionales argentinos con orden de captura activa.
La ministra Patricia Bullrich destacó que en el encuentro se abordaron temas prioritarios como el control de la frontera norte, la pesca ilegal en el Atlántico Sur, el lavado de dinero vinculado al terrorismo, y el narcotráfico y crimen organizado, lo que refuerza el compromiso conjunto de ambas naciones en “enfrentar amenazas comunes para la seguridad regional”.
No es la primera vez que Argentina busca ingresar al Visa Waiver Program. Entre 1996 y 2002, los ciudadanos argentinos pudieron ingresar sin visa a EE.UU., hasta que el beneficio fue cancelado tras la crisis económica de 2001, por decisión del entonces presidente George W. Bush. Ahora, con este nuevo intento formal, el Gobierno de Milei busca reposicionar al país como socio confiable en materia de seguridad internacional, con la expectativa de que la medida no solo facilite el turismo y los negocios, sino también que fortalezca la relación estratégica con Washington, en el marco de la alineación geopolítica con el nuevo gobierno republicano de Trump.