Tras 18 jornadas de audiencias, el juicio por el crimen de Lucio Dupuy está por llegar a su final. En tan solo algunas horas, el Tribunal resolverá si Magdalena Espósito Valenti, madre de la víctima, y su pareja, Abigail Páez, son encontradas culpables o inocentes por los delitos de «homicidio agravado con ensañamiento y alevosía» y «abuso sexual gravemente ultrajante», entre otras acusaciones.
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Este miércoles, se adelantaron algunas novedades inesperadas sobre el veredicto y también sobre la sentencia definitiva que, a diferencia de lo que se pensaba, será apenas una hora más tarde que la pronunciación del veredicto.
El extenso proceso judicial está a nada de finalizar y la esperada lectura del veredicto será leída este 2 de febrero a partir de las 12 del mediodía. Los jueces del tribunal, Alejandra Ongaro, Andrés Olié y Daniel Sáez Zamora, van a determinar -finalmente- la autoría y la responsabilidad penal de las acusadas ya mencionadas frente al brutal asesinato que sufrió el nene de solo 5 años.
Según trascendió, ninguna de las dos acusadas acudirá presencialmente al Tribunal para escuchar el veredicto ni la sentencia final, que se terminará realizando en la misma jornada de manera sorpresiva.
Esto último fue la verdadera novedad del día, ya que se creía que la sentencia definitiva se iba a realizar en una audiencia 15 días después del veredicto por el crimen de Lucio Dupuy. Hasta el momento, nadie duda que los argumentos de la fiscalía coincidirán con la pronunciación del Tribunal para aplicar la pena máxima, tanto a Magdalena como a Abigail.
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EL CRIMEN DE LUCIO DUPUY
El asesinato de Lucio fue cometido el 26 de noviembre de 2021. En primera instancia, Abigail Páez, pareja de la madre del niño, llegó al hospital de Santa Rosa con Lucio en sus brazos, mientras este ya no tenía signos vitales. La autopsia confirmó que el menor estaba muerto desde hacía algunas horas y tenía indicios de haber sufrido abusos. La madre y su novia insistieron en que delincuentes habían ingresado a la vivienda y golpearon brutalmente al niño.
Las pruebas contra ambas acusadas son contundentes. Magdalena Espósito Valenti podría recibir una pena perpetua por la acusación de perpetrar un “abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal, agravado por haber sido cometido por la ascendiente (progenitora), con el concurso de dos personas y aprovechando la convivencia con la víctima menor de 18 años, todo como delito continuado; en concurso real con homicidio calificado por ser la ascendiente, por ensañamiento y alevosía”.
Por su parte, Abigail Páez correría la misma suerte por la calificación de “abuso sexual gravemente ultrajante con acceso carnal, agravado por haber sido cometido por la guardadora, con el concurso de dos personas y aprovechando la convivencia con la víctima menor de 18 años, todo como delito continuado; en concurso real con homicidio calificado por ensañamiento y alevosía”.
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