La Corporación Financiera Internacional (CFI), organismo dependiente del Banco Mundial, confirmó una inversión de US$ 2.400 millones para un proyecto de litio en la provincia de Salta, en lo que constituye la operación más grande de su historia en Argentina. El anuncio se alinea con la estrategia económica del Gobierno nacional y marca un hito para el sector minero, que se prepara para recibir una ola de inversiones en los próximos años.
El vicepresidente de la CFI, Alfonso García Mora, destacó que el proyecto “es el más grande que la CFI haya realizado en Argentina” y subrayó que la iniciativa cumplió con los estándares ambientales internacionales. “Que el Grupo Banco Mundial venga, diseñe la operación y se asegure que la empresa que está desarrollando esa extracción de mineral y esa manufactura es porque se cumplen las mejores prácticas”, señaló.
Un proyecto estratégico
El nombre de la compañía elegida aún no se dio a conocer por tratarse de una firma cotizante en Bolsa, pero se trata de un consorcio de capitales argentinos y extranjeros. La inversión inicial se complementará con futuras inyecciones de capital que podrían alcanzar los US$ 5.000 millones en dos o tres años, consolidando a la Argentina como uno de los principales actores globales en la producción de litio, mineral clave para la transición energética y la electromovilidad.
La CFI explicó que su estrategia busca fortalecer el ecosistema minero en su conjunto, movilizando al sector privado y articulando con provincias, infraestructura, energía, transporte, logística y universidades. El anuncio incluye además la apertura de líneas de financiamiento para Pymes y asistencia técnica en el proceso de privatización de Aysa, lo que refleja un enfoque integral de apoyo al desarrollo económico argentino.
García Mora advirtió que el crecimiento económico mundial enfrenta un momento complejo: “El mundo se encuentra con un volumen de endeudamiento que es el más alto de la historia, con necesidad de invertir al mismo tiempo que se está super endeudado”. En ese marco, la llegada de fondos frescos para proyectos estratégicos en Argentina aparece como una señal de confianza y una oportunidad para dinamizar la economía.



