Un intenso intercambio tuvo lugar en la red social X entre Marcos Galperín, director de Mercado Libre, y Miguel Ángel Pichetto, diputado nacional y jefe de bloque de Encuentro Federal en la Cámara de Diputados, en el marco del debate sobre la irrupción de plataformas chinas de comercio electrónico en Argentina como Shein y Temu.
Pichetto fue quien inició la discusión al expresar: “Fui el primero que habló sobre la necesidad de gravar fuertemente a los productos de las plataformas chinas Shein y Temu. Ahora veo que hay mucha gente preocupada, también el señor Galperín de Mercado Libre. El Congreso tiene que trabajar para regular esta economía de plataformas y cuidar la industria nacional y el empleo argentino”.
Frente a este planteo, Galperín respondió con una postura menos alarmista: “Yo no estoy preocupado. Vamos a competir con ellos de la misma manera que competimos con ellos, hasta ahora en forma muy exitosa, en muchos otros países del continente”.
Sin embargo, Pichetto redobló la apuesta y advirtió: “Mejor empezá a preocuparte, Marcos Galperín, porque las plataformas chinas te van a pasar por arriba. Ya están impactando sobre tu negocio y en la pérdida de empleo de quienes trabajan en la distribución de envíos”.
En paralelo, el presidente de Mercado Libre Argentina, Juan Martín de la Serna, pidió la semana pasada la implementación de “un buen marco regulatorio, que sea igual para todos los que compiten”, refiriéndose a las plataformas de comercio electrónico. En su intervención en el Foro Abeceb, destacó que “las regulaciones son muy importantes, tanto en las finanzas como en el comercio”.
De la Serna señaló que a menudo quienes deben regular “no entienden bien el negocio o responden a intereses de actores más tradicionales” y agregó: “Nos encanta competir porque nos encanta ganar pero los países deben encontrar formas de hacerlo en igualdad de condiciones”.
El ejecutivo alertó sobre el crecimiento de las plataformas chinas que ofrecen productos a bajo costo, advirtiendo que esto puede “socavar el tejido productivo local y poner en peligro los empleos en la región”. Enfatizó además que abrir el mercado sin restricciones implica que “una empresa asiática te envía productos por barco, en realidad estás dando trabajo a empresas chinas, no argentinas”.
Finalmente, De la Serna remarcó la importancia de diferenciarse en el mercado: “Por lo general, estas empresas asiáticas venden productos de baja calidad. La estabilidad y la capacidad de planificar con antelación siempre han sido más difíciles, aunque las condiciones son significativamente mejores que de donde veníamos”.
