El presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio Fabián "Chiqui" Tapia, se encuentra en el centro de una investigación por el uso sistemático y exclusivo de una lujosa aeronave corporativa. Se trata de un jet Gulfstream G400, modelo GLF4, matriculado en el enigmático registro de San Marino con la identificación T7-SUE. Este uso no declarado de un avión de alta gama, con beneficios impositivos y una red de rastreo intencionalmente bloqueada, revela una compleja arquitectura logística.
La información, reconstruida por Clarín a partir de fuentes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), ex empleados de Hangar 1 en San Fernando, y registros aeronáuticos, confirma una certeza: el T7-SUE operó desde Argentina, a requerimiento personal de Tapia, entre junio de 2023 y febrero de 2025. Prácticamente todos los vuelos contaron con la presencia del titular de la AFA a bordo.
El velo de San Marino: exenciones y opacidad
La elección de la matrícula T7-SUE en San Marino no es casual. Si bien esta micronación europea es famosa por ser la república más antigua del mundo y, curiosamente, carecer de aeropuerto propio, su registro aéreo "T7" es altamente codiciado en el circuito de los jets privados internacionales. Este registro ofrece a los propietarios amplias exenciones impositivas y, lo más relevante, una considerable falta de transparencia debido a su carencia de un registro público accesible. Esto dificulta la identificación del propietario real del Gulfstream G400.
Hasta hace poco, la aeronave era gestionada de forma privada, a pesar de figurar en algunos registros como administrada por la empresa Paraguay Logistic Services SA con sede en Asunción. Es fundamental destacar que el país vecino permite el registro y operación de aviones con matrícula extranjera. Sin embargo, el hangar del T7-SUE se ubicó en Hangar 1 del Aeropuerto de San Fernando, en Buenos Aires, desde donde se movilizaba estrictamente a demanda del líder futbolístico.
Viajes de Tapia: de Sevilla a los enclaves de lujo
Los registros de vuelo del T7-SUE revelan un patrón de uso intenso y vinculado a compromisos oficiales y destinos de alto standing. En septiembre de 2023, Tapia utilizó el avión para trasladarse a Sevilla, España, donde la AFA recibió un reconocimiento en el marco de la World Football Summit Europe (WFS Europe).
No obstante, las rutas del jet privado incluyen enclaves de ocio de élite. En los meses previos, la aeronave fue vista en Madrid, Ibiza y Málaga, este último, el aeropuerto habitual para quienes se dirigen a Marbella. Coincidentemente, la presencia del T7-SUE en Marbella se solapó con el escándalo mediático conocido como “Yategate”, que involucró a Martín Insaurralde y Sofía Clerici.
Otro itinerario significativo fue el viaje al preolímpico Sub-23, que aseguró la clasificación a los Juegos Olímpicos de París 2024. El T7-SUE despegó de Fort Lauderdale, hizo escala en Caracas, y aterrizó en San Fernando con Tapia a bordo el 12 de febrero. Otros destinos recurrentes incluyeron Asunción, Paraguay, y vuelos de cabotaje como el realizado a Mendoza.
El bloqueo de rastreo y la conexión Flyzar
La exclusividad en el uso del jet por parte de Tapia generó tanta atención que se solicitó el bloqueo de su seguimiento en plataformas de rastreo aéreo como FlightRadar24 y AirNav Radar. Esta acción requirió el contacto y gestión con al menos siete empresas proveedoras del servicio, un esfuerzo inusual para una aeronave supuestamente operada de manera privada.
El rastro del T7-SUE converge, a partir de julio de 2025, en Flyzar, empresa de Gustavo Carmona que asumió la operación de la aeronave bajo la razón social “Servicios y Emprendimientos Aeronáuticos SA”. Esta compañía posee un historial de relaciones contractuales con la AFA, habiendo trasladado a la Selección Nacional a Rusia 2018.
La conexión Flyzar también es relevante por haber administrado el jet de Lionel Messi (matrícula LV-IRQ), actualmente puesto en venta.
Circuitos paralelos: la ruta Cerdeña y las Islas Baleares
Fuentes del sector aeronáutico indicaron a Clarín que, aunque el T7-SUE voló casi siempre con Tapia, existieron contadas excepciones. Dichas fuentes describieron una operatoria donde figuras como Martín Insaurralde y Jesica Cirio (pareja de Elías Piccirillo, cliente habitual de otros jets de Flyzar) viajaban en Learjets de Flyzar hasta Asunción, y desde allí, se embarcaban juntos en el T7-SUE. Los destinos de estos circuitos paralelos incluían lugares como Cerdeña y las Islas Baleares, reforzando la vinculación del jet con una red de alta esfera social y financiera.
La opacidad del registro de San Marino impide determinar quién es el propietario legal del T7-SUE. Sin embargo, la evidencia es contundente: el jet fue el vehículo personal y exclusivo del presidente de la AFA, con rutas que mezclan la agenda futbolística con destinos de lujo, todo bajo el paraguas de un registro que garantiza el anonimato fiscal y operativo.



