El violento crimen ocurrió durante la madrugada, en un intento de robo en el partido bonaerense de José C. Paz. La víctima, identificada como Alexis Maximiliano Leguizamón, estaba de civil y de franco, y todo quedó registrado por una cámara de seguridad. El hecho ocurrió cerca de las 2.30 en la esquina de Andrés Blanqui y Carmen Puch, en el barrio Nuestra Señora de Caacué.
En las imágenes se ve cómo Leguizamón caminaba hacia un kiosco acompañado por tres amigos, cuando fueron interceptados por un delincuente que apareció en bicicleta y les apuntó con un arma.
Segundos después, otro asaltante se acercó desde atrás y tomó del cuello a uno de los jóvenes. Fue en ese instante cuando Leguizamón se identificó como policía y extrajo su arma reglamentaria. Se desató entonces un tiroteo en plena calle.
Según confirmaron fuentes del caso, los ladrones intentaron cubrirse usando a uno de los amigos del agente como escudo humano. Durante el enfrentamiento, una de las balas disparadas por Leguizamón impactó en el asaltante que iba en bicicleta, quien fue identificado como Josías Gabriel Suárez, de 30 años, con pedido de captura vigente desde 2016 por robo agravado.
Antes de caer herido, Suárez logró efectuar un disparo que impactó en la ingle del joven oficial. Mientras su cómplice escapaba a pie, Leguizamón quedó tendido en el suelo gravemente herido.
Los amigos de Leguizamón le patearon la cabeza al delincuente herido y le arrojaron piedras mientras agonizaba.
Vecinos alertaron al 911 tras escuchar los disparos. Minutos después, efectivos del Comando de Patrullas de José C. Paz y una ambulancia del SAME llegaron al lugar.
Los médicos constataron que el policía aún tenía signos vitales y lo trasladaron de urgencia al Hospital Mercante. Pese a los esfuerzos médicos y a una intervención quirúrgica, Leguizamón falleció poco tiempo después.
La investigación quedó en manos de la fiscal Marisa Marino, de la UFI N° 21 de Malvinas Argentinas. La funcionaria judicial dispuso el relevamiento de cámaras de seguridad y la toma de testimonios a testigos, vecinos y familiares. Además, ordenó que la pesquisa quede bajo responsabilidad de Gendarmería Nacional.
En el lugar del hecho, los peritos hallaron varias vainas servidas y el arma reglamentaria del agente, una Beretta PX4 Storm, que fue secuestrada por orden de la Justicia. Sin embargo, no se encontró el arma utilizada por los delincuentes.
Su novia, tras conocer la trágica noticia, le dedicó un mensaje en redes sociales: “Ya nos vamos a volver a encontrar, amor mío, solo esperame”.