El mercado laboral argentino volvió a mostrar señales de debilidad. Según datos oficiales de la Secretaría de Trabajo, el empleo asalariado en el sector privado cayó en junio por segundo mes consecutivo, con una pérdida de 12.150 puestos. La cifra representa una baja del 0,2% respecto de mayo, dejando el total de trabajadores registrados en 6.256.097, por debajo incluso del nivel de diciembre de 2024.
La tendencia se mantuvo en julio, según anticipa la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL), con una contracción idéntica en los aglomerados del interior y en la Región Metropolitana. La tasa de salida, que mide las desvinculaciones, subió a 2,0%, mientras que la tasa de entrada se mantuvo en 1,8% por tercer mes consecutivo. El resultado: caída neta del empleo formal.
Evolución reciente: de la destrucción a la meseta
El informe oficial traza una línea clara: desde septiembre de 2023, el empleo formal privado entró en una fase de destrucción neta, que se profundizó en el primer trimestre de 2024 con caídas mensuales promedio del 0,4%. A partir de abril, la contracción comenzó a moderarse y en el tercer trimestre se estabilizó. El último trimestre del año pasado mostró una recuperación leve (0,1% mensual), pero en la primera mitad de 2025 el empleo volvió a oscilar, sin consolidar una tendencia clara.
En junio, nueve ramas de actividad redujeron su dotación de personal, tres se mantuvieron estables y solo dos mostraron crecimiento:
Caídas más pronunciadas:
Pesca (-4,9%)
Explotación de minas y canteras (-1,1%)
Transporte, almacenamiento y comunicaciones (-0,6%)
Servicios comunitarios y personales (-0,4%)
Actividades inmobiliarias y empresariales (-0,3%)
Hoteles y restaurantes (-0,3%)
Sin variación:
Suministro de electricidad, gas y agua
Comercio y reparaciones
Agricultura, ganadería, caza y silvicultura
Sectores con crecimiento:
Enseñanza (+0,1%)
Servicios sociales y de salud (+0,1%)
Mientras el empleo asalariado privado retrocedía, el trabajo independiente mostró una leve expansión del 0,3% (8.200 personas más). El crecimiento se explica por el aumento de 12.500 nuevos monotributistas (+0,6%), aunque fue parcialmente compensado por caídas en autónomos (-0,4%) y monotributo social (-1,1%).