Una explosión resonó en la madrugada de este martes, generando preocupación entre los vecinos del barrio Recoleta. El estruendo ocurrió en la sala de calderas de un edificio de 11 pisos situado en Sánchez de Bustamante al 1800, desencadenando un extenso operativo de emergencia. Más de 70 personas fueron evacuadas, incluyendo a dos con discapacidad auditiva.

El cuerpo de Bomberos de la Ciudad se movilizó con celeridad tras recibir un aviso al 911 que alertaba sobre el incidente. La detonación, que tuvo lugar en uno de los dos subsuelos del edificio, causó severos daños materiales; se destruyeron dos portones metálicos, se rompieron paneles de vidrio y se registraron colapsos en secciones de mampostería, además de la inundación de un garaje.

Asimismo, se hizo presente la Unidad K9, la cual está especializada en búsqueda y rescate con perros entrenados, con el objetivo de confirmar que no hubiera víctimas atrapadas en el lugar. Afortunadamente, las autoridades confirmaron que no hubo heridos de gravedad ni pérdidas de vidas.

La Guardia de Auxilio también participó del operativo, mientras que se pidió la intervención de profesionales de Metrogas y Edesur para evaluar las instalaciones de gas y electricidad en el edificio y prevenir posibles riesgos.

En el curso de la evacuación, la policía asistió a varios vecinos, entre ellos una persona sorda y otra con hipoacusia que se ubicaban en los pisos 12 y 13, quienes necesitaron ayuda para salir al no haber escuchado los avisos de emergencia. También se brindó asistencia a una mujer mayor que se mostraba reacia a evacuar su vivienda.

Los bomberos encontraron dificultad para ingresar a la planta baja debido al agua que anegaba el garaje, donde varios vehículos estaban estacionados. Mientras tanto, Metrogas cortó el suministro de gas de forma temporal, y Edesur verificó que las cámaras eléctricas no hubieran sufrido daños, asegurando así que los residentes pudieran volver a sus hogares sin riesgos.

El comandante Diego Coria, de Bomberos de la Ciudad, informó que no existía peligro de derrumbe y que las columnas estructurales del edificio se encontraban en buenas condiciones. “Solo hubo un desplazamiento de una pared. En minutos podremos determinar la causa de la explosión. No podemos ofrecer más información por el momento”, declaró en una breve conferencia. Además, mencionó que los vehículos estacionados sufrieron daños menores, como roturas de vidrio, y que dos personas decidieron quedarse voluntariamente en el edificio a pesar del incidente.