En una entrevista con el periodista Luis Novaresio, el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, lanzó una serie de definiciones punzantes sobre el rumbo político y la gestión del presidente Javier Milei, a quien acusó de gobernar con una lógica ideológica “fanática” y de evitar los debates estructurales que necesita el país.
“El pragmático no tiene dogmas ideológicos, a diferencia de un Gobierno que tiene profundos dogmas ideológicos. Del dogma al fanatismo hay una línea muy fina”, afirmó el mandatario patagónico, al ser consultado sobre el actual clima político en la administración libertaria.
Cuando Novaresio le preguntó directamente si veía fanatismo en el Gobierno nacional, Torres no dudó: “Yo creo que hay mucho fanatismo”, subrayó, y planteó la necesidad urgente de construir consensos reales: “Tengamos una mesa de trabajo, dejemos de discutir pavadas por Twitter y pongámonos a laburar en una Argentina que las futuras generaciones estén orgullosas de lo que pudimos hacer en conjunto”.
Además, cuestionó el estilo confrontativo del oficialismo y advirtió que muchas veces el conflicto se disfraza de entretenimiento mediático: “El conflicto no es pelearse con Ricardo Darín por lo que vale una docena de empanadas. Eso es circo, es correr el eje de lo importante. El conflicto de interés se da en una mesa donde tenemos que discutir en serio”, enfatizó.
Con tono crítico, también apuntó contra quienes dentro del espectro político intentan congraciarse con el poder libertario: “Todos esos que creen que cebándole mate al armador de turno de La Libertad Avanza van a sobrevivir, podrán estar cuatro años más de diputados pero no van a hacer la diferencia. Eso es una mirada mediocre de la política”, lanzó.
La declaración de Torres marca un nuevo episodio en la tensión entre gobernadores del interior y el Ejecutivo nacional, justo cuando el Gobierno intenta reflotar el diálogo a través del Pacto de Mayo. El mandatario chubutense dejó en claro que no está dispuesto a ser un espectador, y que, en su visión, la política exige acuerdos verdaderos, no escenificaciones.