Una situación de extrema gravedad conmueve a la ciudad de Balcarce, donde un hogar de cuidado infantil quedó en el centro de un escándalo luego de que se difundieran grabaciones en las que se escuchan amenazas y trato intimidatorio hacia niños que residían en el lugar. La circulación de esos audios provocó la intervención de la Justicia y de la Secretaría de Niñez, lo que derivó en la expulsión de dos trabajadoras del establecimiento y la apertura de una investigación formal por maltrato.
Las grabaciones, que llegaron a manos de las autoridades y se viralizaron en el entorno local, muestran a adultos dirigirse a menores con un tono amenazante y expresiones que, según los investigadores, configuran abuso verbal. El contenido de los audios generó indignación en la comunidad y puso bajo la lupa el funcionamiento interno del hogar, donde se esperaba que el cuidado y la protección de los menores fuera la prioridad institucional.
¿Conducta habitual?
A partir de la denuncia y la presentación de los materiales expuestos públicamente, tanto la Justicia como la Secretaría de Niñez comenzaron a actuar de oficio. Los organismos buscan determinar si lo registrado en las grabaciones es parte de un patrón de conducta habitual en el hogar o se trata de hechos aislados que todavía deben ser esclarecidos. Por ahora, los investigadores analizan no solo los audios, sino también las condiciones de vida de los chicos y la dinámica del personal con los residentes.
En el marco de estas actuaciones, dos empleadas del hogar fueron separadas de sus funciones en forma preventiva. La decisión fue adoptada para garantizar que las pesquisas puedan avanzar con libertad y sin interferencias, y también para proteger a los menores mientras se define la situación administrativa y judicial de las personas implicadas. En paralelo, se espera que en las próximas horas la Justicia cite a declarar a testigos y a quienes estuvieron presentes en los hechos que se investigan.
Organizaciones locales vinculadas a la defensa de los derechos de la niñez expresaron su alarma y su rechazo ante los hechos. Para sectores vinculados al acompañamiento de chicos en situaciones de vulnerabilidad, este tipo de situaciones reflejan la necesidad de procedimientos más estrictos, monitoreo constante y protocolos claros para evitar que niños bajo cuidado institucional sean expuestos a malos tratos o amenazas.
Sin detalles de las empleadas
Hasta el momento, las autoridades no brindaron detalles sobre la identidad de las empleadas apartadas, ni sobre si existieron denuncias previas contra el hogar. Sin embargo, trascendió que la investigación se encuentra en una etapa temprana y que la prioridad de los equipos técnicos es garantizar el resguardo de los menores mientras se recopilan elementos de prueba que permitan avanzar en las conclusiones.
El caso también generó un llamado de atención entre funcionarios provinciales, que subrayaron la importancia de fortalecer los mecanismos de supervisión de este tipo de instituciones. Voceros oficiales indicaron que se reforzarán las auditorías internas y los controles para asegurar que ningún niño esté expuesto a situaciones de riesgo.
Mientras tanto, la comunidad de Balcarce sigue conmocionada por la divulgación de los audios y espera que las autoridades avancen con rapidez en una causa que interpela la protección de los derechos más básicos de los niños.
