El Gobierno Nacional aprobó un aumento sin precedentes en las tarifas de Agua y Saneamiento Argentina (AySA), que entrará en vigor a partir de abril en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Esta medida, que implica un incremento del 200% en los servicios de agua potable y cloacas, generó preocupación entre los usuarios, quienes verán esta suba reflejada en sus próximas facturas.
La Resolución 9/2024 de la Secretaría de Obras Públicas de la Nación también establece la implementación de incrementos mensuales a partir de junio, los cuales estarán indexados de acuerdo a la evolución de la inflación. Además, en línea con la reciente desregulación aprobada por el Gobierno, se prevé una revisión tarifaria en agosto.
De igual forma, desde el Gobierno señalaron que se mantendrán los beneficios de la tarifa social y comunitaria, así como el subsidio destinado a los segmentos más vulnerables, que representan aproximadamente el 20% de los clientes de AySA. La empresa aseguró que con estas medidas alcanzará el equilibrio financiero y dejará de requerir subsidios a partir del tercer trimestre.
El impacto de estos aumentos será significativo para diferentes segmentos de usuarios. Por ejemplo, los usuarios residenciales de nivel alto experimentarán un aumento considerable en sus facturas, pasando de un promedio de $6.200 en marzo a $19.200 en abril por el servicio de agua y cloacas.
También los usuarios residenciales del nivel medio verán un aumento, que pasará de $5.600 a $17.500 en sus facturas mensuales, mientras que aquellos clasificados como nivel bajo tendrán incrementos de $4.500 a $14.000.
Los hogares que solo cuentan con el servicio de agua también se verán afectados por el aumento. Por ejemplo, aquellos en zonas altas pasarán de pagar $9.900 a $30.700, mientras que en zonas medias y bajas los aumentos serán de $3.200 a $10.000 y de $1.700 a $5.360, respectivamente.
Por otro lado, los usuarios no residenciales, incluyendo industrias, comercios, edificios, hospitales, colegios y municipios, también sentirán el impacto económico de estas medidas, con aumentos considerables en sus facturas de AySA.
