En Chiclayo, la ciudad peruana donde el flamante pontífice vivió y predicó durante casi 20 años el nuevo papa León XIV, existe un club fundado en 1928 que lleva el mismo nombre, los colores y un escudo similar al querido San Lorenzo de Almagro del difunto papa Francisco.
Se trata del Club Social Deportivo San Lorenzo de Almagro, conocido en la zona como "Los Santos del Cercado", que milita en las categorías menores del fútbol peruano.
Aunque el equipo no goza de reconocimiento nacional como Juan Aurich, el club más destacado de la región, su historia incluye momentos memorables, como el campeonato regional logrado a fines de los años sesenta y su participación en la etapa final de la Copa Perú. En 1942, fue el primer equipo de Chiclayo en vencer a Universitario, uno de los grandes del fútbol peruano.
Su fundación, el 28 de marzo de 1928, fue impulsada por un grupo de jóvenes que, inspirados por el club de Boedo, quisieron replicar esa identidad en tierras peruanas. El homenaje a los colores y al escudo fue un guiño directo al Ciclón argentino.
La conexión no termina ahí, el clásico rival del San Lorenzo chiclayano es nada menos que Boca Juniors de Chiclayo, otro club inspirado en el fútbol argentino que viste de azul y amarillo. Juntos protagonizan el llamado “Clásico Chiclayano”, que se disputa en el estadio Elías Aguirre, con capacidad para 25 mil personas.
Así, mientras Francisco hizo historia como el primer papa hincha de San Lorenzo, su sucesor León XIV encuentra, por esas vueltas del destino, una insólita coincidencia futbolera en el lugar donde construyó su vocación pastoral.