La obra pública fue una bandera para la mayoría de los Gobiernos a lo largo de la historia. Desde la construcción de grandes edificios, puentes hasta obras menores como la repavimentación de pequeños tramos de rutas servían para mostrar la gestión. En la actualidad, eso se ve a cuentagotas y los datos son concretos.

De 2337 que la Nación tenía bajo su órbita y se encontraban en diferentes etapas de ejecución antes de la asunción de Milei, hoy solo continúan 183 proyectos de infraestructura. Unos 1668 fueron dados de baja y otros 486 fueron transferidos a las provincias y diversos municipios. En el caso de los gobernadores, recibieron 465 obras y otras 21 se entregaron a los intendentes. Es decir, la mayor parte de la obra pública se encuentra totalmente paralizada, según consigna TN.

Entre las principales obras que fueron frenadas se encuentran la construcción de escuelas, viviendas, rutas y cloacas, entre otras.

La obra pública en números

En primer lugar, vale aclarar que la Secretaría de Obras Públicas decidió darle continuidad a solo a 183 obras que se encontraban en ejecución o paralizadas. Pasando en limpio, de ese número 122 fueron reiniciadas, 42 están próximas a ser reiniciadas, mientras que 4 fueron licitadas y 9 se encuentran en ese proceso.

Con qué panorama se encontraron y la posible participación del sector privado

El secretario de Obras Públicas Luis Giovine participó de la convención de la Cámara Argentina de la Construcción y, en ese marco, defendió el ajuste que el Gobierno de Javier Milei lleva adelante en la obra pública.

En primer lugar, explicó que cuando llegaron al poder, se encontraron con un “gran desorden en lo conceptual, administrativo, en la lógica y las deudas muy importantes”.

Además, señaló que “lo primero fue ordenar el caos ante 2337 obras que se encontraban bajo jurisdicción nacional”.

Por otra parte, comentó que “21 provincias firmaron estos acuerdos de transferencia y de acuerdo de bajas y continuidades con el Gobierno nacional”.

“122 de las 183 obras que iba a ejecutar Nación reiniciaron su actividad, lo que equivale a casi el 70% del paquete global de obras comprometidas”, precisó.

Otro tema que atrasó el reinicio de las obras es el de los contratos que deben revisarse. Al respecto apuntó que “estamos negociando en 42 obras acomodar estos contratos para poder continuar”, y agregó: “algo no previsto se presentó: rescindir la obra y volver a licitarla”. Esta situación se da en nueve obras, mientras que hay otras seis donde se mantienen negociaciones para “acomodar en lo contractual”.

Con respecto al Procrear, el funcionario reconoció que “el objetivo desde la disolución del Procrear es transferir todas las obras en ejecución dando prioridad a las provincias y, de no encontrar interés, resolver todos los programas y grupos de viviendas que no son aceptados por las provincias”.

Además, reiteró que la idea es que “pueda intervenir la iniciativa privada y habrá novedades en el corto plazo”