En el programa de ayer de A Dos Voces (TN) los candidatos presidenciales Javier Milei (La Libertad Avanza) y Sergio Massa (Unión por la Patria). Cada uno a su turno, conversaron con los periodistas Edgardo Alfano y Marcelo Bonelli y dejaron algunas definiciones, faltando tan solo 4 días para el ballotage que definirá quién de los dos se convierte en presidente de la Nación.
Milei aseguró que la alianza electoral que trabó con Juntos por el Cambio no presenta grandes discrepancias: “Con Mauricio Macri y Patricia Bullrich tenemos un 90% de coincidencias”. Así mismo, luego de que la diputada electa de LLA Lilia Lemoine causara conmoción con sus declaraciones sobre los medios públicos, Milei manifestó su apoyo a sus dichos. “Los medios estatales tienen que ser privatizados, son usados como mecanismos de propaganda”, señaló.
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A su vez, desmintió que tuviera una iniciativa de privatizar los clubes de fútbol, y remarcó que su idea es que “se tendría que abrir la posibilidad de tener una suerte de Manchester City en la Argentina”. “¿Qué tiene de malo? ¿en qué afecta a las otras instituciones? No obligo a nadie. En los clubes de fútbol tiene que haber distintos esquemas societarios”.
También se refirió a uno de los momentos más picantes del debate del domingo pasado, cuando Sergio Massa lo increpó por los motivos de su fallida pasantía en el Banco Central: “Me tiró tres carpetazos en el debate. No me sorprende, porque es un modus operandi del kirchnerismo. Sacó el tema de la pasantía del Banco Central, y lo que menos se imaginó es que soy una persona autocrítica. En esa pasantía no pude integrarme bien. Si hubiera sido una persona que tiene el ego en la estratósfera, hubiera sido un golpe duro”, afirmó el libertario.
Así mismo, evitó informar sobre quién sería su ministro de Economía, y adelantó que lo anunciaría en caso de ganar las elecciones. Sobre la economía, se mostró más bien alarmista, y detalló que “la hiper(inflación) está a la vuelta de la gente”. “Queremos que el ajuste lo pague la política, no se lo vamos a hacer pagar a la gente”, agregó.
Por su parte, Sergio Massa, candidato de Unión por la Patria y actual ministro de Economía, adelantó que en caso de ser presidente la salida del cepo cambiario “va a llevar aproximadamente 12 meses de trabajo”, y al igual que su contrincante evitó dar nombres sobre quién será su ministro de Economía.
Algunas de las medidas que llevaría adelante son la habilitación de un millón de créditos hipotecarios disponibles a partir del 1 de enero; la suspensión por 180 días del pago de las cuotas de los créditos UVA y su reformulación a créditos atados al coeficiente de variación salarial. También habló de la negociación con el FMI para cambiar el programa sobre la base de exportaciones y salir del actual esquema inflacionario, además de que unificará empresas estatales.
Una de las grandes consignas del candidato es la necesidad de generar un “gobierno de unidad nacional”. “La Argentina necesita aún de los que agreden de más. Milei es un adversario electoral, no es mi enemigo”, aseguró, y en este sentido anunció la propuesta para que “el bloque principal de la oposición a partir del 10 de diciembre” tenga a cargo la oficina anticorrupción.
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Frente a las dudas que parte del electorado tiene sobre la posibilidad de que Cristina Kirchner influencie al eventual presidente, Massa fue contundente: “A mí no me maneja nadie. Me va a manejar el compromiso que fui asumiendo. Entiendo que pueda existir la desconfianza, pero en cada lugar digo lo que pienso y hago lo que siento y lo que está en juego es si gobierna Milei o si gobierno yo. El que tiene la responsabilidad y la lapicera es uno”, sentenció.
Aseguró que no está entre sus planes eternizarse en el poder, si no “construir alternancia y bipartidismo”. “El cambio más importante que le puedo dar a los argentinos es mi capacidad de diálogo. Quiero ser presidente y ponerme al frente de la seguridad, al lado de (Maximiliano) Pullaro en Santa Fe y de cada intendente del Gran Buenos Aires”, dijo. También garantizó “la derrota de la inflación en el 2024 a partir de recuperar exportaciones, que este año fueron dramáticas por la sequía, que dejó a la Argentina sin moneda”. “La mejora la vamos a tener el año que viene porque vamos a derrumbar a la inflación a la mitad”, prometió el candidato, quien estimó que el próximo año el país va a tener “un saldo exportador neto de más de U$S7000 millones”, lo que permitirá ir “a déficit cero, unificación de empresas públicas y hacer más eficientes las contrataciones del Estado”.
Entre las cosas que dijo el candidato sobre su contrincante de cara al ballotage, criticó, nuevamente, su propuesta de dolarización. “La dolarización es una megadevaluación; la apertura de la economía es cierre de pymes; romper con el Mercosur es que cientos de cordobeses se queden sin mercados, y romper con China significa perder casi US$19.000 millones de mercado exportador”, puntualizó.
