Ante la preocupación generada por la palabra "ciclogénesis" en los medios, la meteoróloga Cindy Fernández, especialista de Meteored, explicó a NA que este término se refiere a un proceso natural de la atmósfera, especialmente frecuente durante el invierno en Argentina, y no a un fenómeno extraordinario.
Fernández aclaró que la ciclogénesis no es el evento meteorológico en sí, como la lluvia o el viento, sino la formación de un centro de baja presión que da origen a un ciclón. Según la experta, gran parte del temor se debe al impacto que genera la palabra cuando aparece en titulares alarmistas.
Los detalles
Para disipar confusiones, la meteoróloga destacó las diferencias entre tipos de ciclones. En Argentina, se forman principalmente ciclones extratropicales, que surgen del choque entre masas de aire frío y cálido, pueden originarse sobre tierra, no presentan un "ojo" definido y sus vientos máximos, en casos extremos, alcanzan los 100 km/h. Por el contrario, los ciclones tropicales, como los huracanes, se forman sobre mares cálidos, se alimentan del calor oceánico, poseen un "ojo" característico y sus vientos pueden superar los 200 km/h. Estos últimos no se forman en territorio argentino.
El verdadero peligro, explicó Cindy Fernández, es la velocidad con la que el ciclón se intensifica. Cuando este desarrollo ocurre de forma muy rápida, se denomina "ciclogénesis explosiva" o "bomba meteorológica". Es este fenómeno el que puede generar condiciones climáticas adversas más severas.
Además, la especialista subrayó que estos procesos son cuidadosamente monitoreados por el Servicio Meteorológico Nacional, que emite las alertas necesarias para prevenir riesgos en la población. "Si en lugar de ‘ciclogénesis’ dijéramos simplemente ‘formación de un centro de baja presión’, probablemente el impacto sería mucho menor", reflexionó Fernández, invitando a la calma y a entender mejor los términos técnicos.
Las zonas más afectadas serían el este de Córdoba, el centro y sur de Santa Fe, el sur de Entre Ríos y el norte de Buenos Aires, donde las lluvias podrían alcanzar entre 30 y 60 milímetros, con picos localmente superiores.