El Banco Central (BCRA) anunció que, a partir del 1 de enero de 2026, las bandas de flotación del dólar se actualizarán de acuerdo al porcentaje de inflación mensual que informe el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
Con esta medida, la entidad financiera busca que el techo y el piso entre el que se puede mover la moneda no queden atrasados ante la evolución de los precios internos, en un contexto de desinflación gradual y normalización monetaria.
Hasta ahora, las bandas, que funcionan como un límite para evitar saltos bruscos del dólar, no se actualizaban automáticamente por el Índice de Precios al Consumidor (IPC). Además, la decisión se complementa con un nuevo programa de acumulación de reservas y apunta a darle mayor previsibilidad al mercado cambiario.
El sistema de bandas cambiarias empezó el 11 de abril y estableció para la cotización de esa moneda un piso de $1000 y un techo de $1400. Dentro de ese rango, el tipo de cambio puede fluctuar libremente según la oferta y la demanda.
Pero, si se acerca demasiado al piso o al techo, el BCRA puede intervenir para evitar movimientos por fuera de esos límites. El objetivo es disminuir la volatilidad sin fijar un precio único para la divisa.
Si el tipo de cambio alcanza el valor inferior, la entidad vende pesos (compra dólares) para mantener ese nivel y aumentar reservas internacionales, cosa que favorece el aumento de demanda y circulación del dinero.
Si llega al valor superior, el Banco compra pesos (vende dólares) también para sostener ese nivel y absorber liquidez sobrante, reduciendo pasivos monetarios.
Dentro de la banda, el organismo, asimismo, puede intervenir de manera ocasional, con el fin de evitar fluctuaciones excesivas en función de objetivos macroeconómicos.
Además, el Banco Central solo permitió que los límites varíen entre el -1% y el +1% respectivamente. Por ejemplo, para el 15 de diciembre el piso es de $921,20 y el techo de $1518,52.



