Manuel Adorni, vocero presidencial, lanzó fuertes críticas contra el Congreso tras la votación que rechazó los vetos a las leyes de Emergencia Pediátrica y Financiamiento Universitario. Describió la decisión como “un horror” y acusó a la oposición de actuar con “demagogia” en un momento de creciente tensión política y social en Argentina bajo el gobierno de Javier Milei.
Adorni sostuvo que el Poder Legislativo desestimó “el esfuerzo que hizo la gente” para mantener la estabilidad fiscal y construir “una Argentina con futuro”. Denunció que “la casta” busca “destruir el plan económico” impulsado desde la Casa Rosada, en referencia a los bloques opositores.
En defensa del rumbo económico de la administración libertaria, el vocero afirmó que las políticas aplicadas permitieron “sacar a millones de argentinos de la pobreza” y avanzar en la reducción de la inflación. Además, explicó que financiar la ley universitaria demandaría un costo anual de 1,9 billones de pesos, lo que implicaría sacrificar partidas esenciales del presupuesto nacional.
Como opciones para cubrir ese gasto, Adorni propuso suspender por completo el presupuesto del Poder Legislativo durante cuatro meses, despedir a 66.550 empleados públicos, cancelar todos los planes sociales por un trimestre o eliminar las subvenciones a los servicios energéticos.
Sobre la Marcha Federal Universitaria, que contó con el respaldo de gremios, estudiantes y figuras políticas opositoras, Adorni la calificó como una coalición de “todos los enemigos del progreso”. Incluyó a la CGT, la CTA, ATE, partidos de izquierda, abanderados de Palestina y al gobernador bonaerense Axel Kicillof entre sus participantes.
Para el vocero, esta movilización no fue un reclamo auténtico por la educación pública, sino un frente opositor que busca frenar el avance hacia “una Argentina distinta”, en clara confrontación con el oficialismo.
Estas declaraciones reflejan la estrategia del Gobierno de mantener una postura confrontativa con sectores legislativos y sociales que rechazan los recortes en salud y educación, señalando que el rechazo a los vetos evidencia que el Congreso se enfoca en “la política de corto plazo” y no en apoyar el plan de estabilización económica.
Adorni sintetizó así el impacto del rechazo al veto en el Congreso: “La Ley de Financiamiento Universitario equivale a suspender todos los subsidios energéticos por 4 meses”. Su mensaje busca que se comprenda “el horror que han votado” los legisladores opositores.