La investigación por cuatro casos de presunto maltrato infantil en un hogar convivencial de Balcarce puso en la mira a dos exempleadas de la Sociedad de Protección a la Infancia, tras la difusión de los audios en los que se escuchan insultos y amenazas.
Una de ellas era la presidenta de la institución, Alejandra Género, y la otra, Marisa Benaduche, trabajaba en el lugar en el que sucedieron los supuestos agravios. Ambas fueron despedidas y deberán prestar declaración durante la semana próxima.
La causa comenzó luego de conocerse un audio de cuarenta minutos que grabó una empleada, en el que se oyen una serie de insultos, amenazas y gritos hacia dos chicos que viven en el hogar. Eso habría ocurrido a finales de noviembre.
El maltrato se desató por el accionar de uno de los menores. Él rompió un vidrio en medio de una crisis emocional ya que no quería que lo separen de su hermano, quien podría ser trasladado a otro sitio. Según la denuncia, Género retó y le habló de forma violenta al niño que realizó esa acción.
El periodista Hugo Ponce dio a conocer la grabación de voz, que, en este momento, es la principal prueba del caso. En ella, se escuchan las siguientes frases: "Si llegás a escupir, te rompo la cara. Te la rompo en 20", "Cállate la boca porque te pego una cachetada" y "Esto no es un hotel, mañana te llevo a un reformatorio", entre tantas otras.
En otro momento, la mujer que habla en el material dijo: "Me lo van a tener que pagar", en referencia al vidrio que se había roto. Previo a esto, les preguntó muy enojada quién lo había roto y hasta les indicó el precio del mismo.
"La vida insoportable se las voy a hacer yo. Son una basura. No los soporto más. No valoran un carajo. Te vas a quedar solo toda tu vida. Te haces la víctima y esas son lágrimas de cocodrilo", expresó luego, mientras uno de los chicos lloraba desconsoladamente.
Además, en otras partes del audio, la agresión verbal sube de nivel. Un ejemplo de ello es esta frase: "Cuando vayan a un reformatorio, van a tener que ir de a dos al baño. Los van a golpear, les van a pegar con una toalla mojada, los van a meter en agua fría, porque ustedes son unos groseros".
Por el momento, el Juzgado de Familia N°6 de Mar del Plata dictó una medida cautelar el 5 de diciembre con el objetivo de proteger a los menores involucrados, mientras avanza la investigación penal. La Escuela Especial N°502 había radicado la denuncia luego de intervenir al tomar conocimiento del episodio.
La jueza determinó una orden de alejamiento de 200 metros y la prohibición de cualquier tipo de contacto, ya sea por teléfono, redes sociales o mensajes, con los chicos. Varios trabajadores del hogar deben cumplir esta medida, entre ellos las acusadas mencionadas, y la misma se aplica en todos los lugares en los que los chicos puedan estar, como sus casas, la escuelas y actividades deportivas o recreativas.



