Como todos los años, en noviembre, se festeja la semana de la prematurez. Esta iniciativa fue impulsada por Unicef a nivel mundial con el fin de realizar actividades de prevención y promoción de la salud, relacionadas con el nacimiento prematuro de bebés. Las mismas están dirigidas a familias transitando la internación de su hija/o en una Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN), a aquellas que ya la han transitado, a equipos de salud y profesionales en formación, y a la sociedad en general. La idea es generar conciencia.
Este año, uno de los lemas es: “Acceso de la familia a la Neo. Sin restricciones. Sin horarios. Todo el tiempo”. Esto significa que la familia tiene derecho a estar presente en la UCIN siempre que lo desee. Como parte del equipo de Neonatología de CEMIC, volvemos a sumarnos a esta campaña.
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UCIN sin restricciones:
“La temprana relación que se establece entre los padres y sus hijos es la piedra angular en el desarrollo del niño. Estas interacciones le dan al niño confianza y seguridad y además le permiten desarrollar lazos emocionales saludables que son importantes para el proceso del apego” (Wyly VM).
La manera en que se maneje la UCIN y cada integrante del equipo, será una de las puertas de entrada para que pueda construirse el vínculo entre el bebé y su familia y los roles parentales. Una neonatología sin restricciones contribuye de manera positiva para que esto suceda tempranamente.
Un cartel en la entrada del servicio que diga “Bienvenidos. UCIN sin restricciones 24 horas”, es una buena manera de hacer valer este derecho. Y no olvidarnos como personal de salud, que es necesario abrazar a esta familia, creando un entorno agradable. Es fundamental acompañarlos, brindarles información oportuna y ayudarlos en el proceso para que puedan construir y cumplir con el rol de madres y padres dentro del contexto traumático que les tocó vivir.
En este artículo me refiero a familia como los cuidadores principales de los bebés, siendo generalmente 1 o 2 personas.
¿Por qué es importante estar presente?
Es frecuente que las familias transitando la internación de su hija/o en la UCIN, pregunten si su bebé se da cuenta de que están presentes. Y a eso les respondemos: SI.
Estar presente es muy importante ya que les permite cuidarlos y sostenerlos afectivamente. No solo tiene beneficios para ellos, sino también para ustedes. Favorece el vínculo y apego, aumenta posibilidad de hacer contacto piel a piel y estimula la lactancia, permite conocerse y empoderarse como cuidadores y favorece el neurodesarrollo. Calma, tranquiliza, alivia, reconforta y previene el estrés de sus hijas/os. Además, impacta positivamente en la alimentación, y en consecuencia en el desarrollo y crecimiento físico y emocional.
De a poquito se van constituyendo como familia y a medida que sus bebés crecen y están clínicamente estables, el rol de madres/padres comienza a ser más activo para tenerlos a upa, calmarlos, alimentarlos, cambiarlos e higienizarlos.
Estar presente, ocuparse, apoyarse en el equipo de salud para ir animándose a más, va a permitirles adquirir seguridad y autonomía en el manejo de sus hijas/os, uno de los requisitos para poder irse de alta.
¿Cómo estar presente?
Estar presente simplemente es estar al lado de sus bebés, sea cual fuera la situación. Y apreciar eso tan simple y valioso que es estar y acompañar. En un principio esa presencia será de una manera más pasiva. De acuerdo a la edad gestacional y al estado clínico, es probable que sus hijas/os manifiesten pocas señales que puedan interpretar. Pero gradualmente empezaran los cambios. Tienen que ser pacientes y aprender a adaptarse a los tiempos de ellos e ir festejando los pequeños grandes logros que puedan hacer día a día. Y así esa presencia, de a poco, irá siendo más activa para que cerca de la hora de irse a casa, se transforme en acción y roles maternos y paternos seguros y autónomos.
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¿Qué pueden hacer las familias con sus bebés en la UCIN?
De acuerdo a la madurez y estado clínico, estas son algunas tareas que pueden hacer con sus bebés. Algunas requerirán asistencia del equipo de salud.
- Mirarlos: además de empezar a enamorarse de sus bebés con tan solo mirarlos, observarlos les permitirá conocerlos e interpretar las expresiones faciales y sus posturas corporales, darse cuenta si están cómodos o no, y de acuerdo a eso, poder hacer algo para calmarlos. A medida que madure, llegara el día en que además se encuentren sus miradas.
- Hablarles: en un tono suave puede calmarlos. Siempre hay que estar atentos a la reacción de sus bebés frente al estímulo y detenerse si genera estrés.
- Tocarlos: pueden apoyar de manera firme sus manos sobre una parte del cuerpo de sus bebés, hacerles alguna caricia, dejar que se agarre de uno de sus dedos, lo que le dará tranquilidad y los sentirá más cerca.
- Hacer contacto piel a piel: estar en contacto directo con ustedes trae incontables beneficios para ambos, fisiológicos y emocionales. Es lo más parecido al útero materno: pueden sentir sus latidos del corazón, su olor, su voz, su calor y los movimientos a los que estaba acostumbrado dentro del útero. A disfrutarlo.
- Alimentarlos: existen diferentes maneras de hacerlo. Sea cual fuera la forma, es importante estar.
- Ayudarlos a tener una buena postura: es importante la correcta alineación y organización del cuerpo, similar a la intrauterina, con brazos y piernas flexionados y hacia la línea media del cuerpo. Esto ayuda a la autorregulación, organización de la conducta emocional y motriz, al descanso, confort, crecimiento y desarrollo. Cambiarlos de posición, de manera suave y anticipada, también les permite experimentar distintas experiencias sensoriales.
- Acompañarlos en los procedimientos médicos en los que puedan estar presentes. Tocarlos, tenerlos a upa, calmarlos, sostenerles el chupete.
- Cambiarles el pañal, sacarles y ponerle la ropa, higienizarlos, bañarlos, darles la medicación.
- Conocer los signos de estrés y de confort de sus bebés y saber qué hacer en cada caso, información brindada por el equipo de salud.
Cuidando a los que cuidan:
Para poder estar presentes, es fundamental que los cuidadores, y principalmente la madre, que se está recuperando de un parto o cesárea y preparándose para la lactancia, estén bien descansados, dormidos, hidratados, alimentados y emocionalmente contenidos. Lo ideal es contar con una red de contención familiar que pueda ayudarlos. Pidan ayuda y déjense ayudar. Cuidarse es cuidar a sus hijos.
En los tiempos modernos, solemos medir nuestras acciones desde lo concreto, querer obtener resultados inmediatos y tenemos poca tolerancia a la espera. La paciencia es una actitud a implementar cuando se vive la internación de un bebé en la UCIN, haciendo esta situación más tolerable y llevadera.
Estas son algunas de las intervenciones de Terapia Ocupacional en la UCIN:
- Favorecer, proteger y promocionar el desarrollo sensorio motor del neonato.
- Valorar y tratar distintas lesiones, patologías o déficits con origen o impacto en el movimiento, la postura, a nivel osteomuscular o sensorial.
- Empoderar a la familia a través de recomendaciones y apoyos, para el correcto desarrollo de sus roles parenterales y practica de las actividades de la vida diaria de sus bebés: alimentación, higiene y cuidado personal, autorregulación, rutinas cotidianas y hábitos de sueño.
- Favorecer la lactancia materna.
- Participar en la planificación de la transición al hogar del niño y la familia atendiendo a sus necesidades.
Lic. Sonia Reijenstein
Terapista Ocupacional
IG: soniar.hacer.to
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