El caos se apoderó de Ahmedabad cuando, apenas un minuto después del despegue, un Boeing 787 de Air India con destino a Londres Gatwick se estrelló contra un albergue de estudiantes de medicina. Entre el humo y el fuego, Vishwash, un británico de origen indio, emergió de entre los escombros, con el cuerpo chamuscado y la mirada perdida, sin comprender aún que era el único sobreviviente de la tragedia aérea más devastadora en India en los últimos 30 años.
La confusión reinaba en las calles mientras equipos de emergencia intentaban asistir a los afectados. Vishwash fue trasladado en ambulancia al hospital de Ahmedabad, donde horas más tarde se confirmó lo impensado: de los 241 pasajeros y tripulantes a bordo, era el único que logró salir con vida. El azar lo había ubicado en el asiento 11A, en el lado opuesto al impacto, mientras su hermano Ajay, sentado en otra fila, figuraba entre las víctimas fatales.
Un testimonio desgarrador
Desde la cama 11 del hospital, Vishwash reconstruyó lo ocurrido. Apenas el avión dejó la pista, sintió un freno brusco, un estruendo y el inicio del incendio. En un instante, identificó un hueco y, sin dudarlo, saltó por la salida de emergencia, logrando escapar antes de que el fuselaje quedara envuelto en llamas. El humo negro le impedía avanzar, y lo único que alcanzó a ver fue los cuerpos sin vida de los pasajeros, muchos aún sentados en sus lugares con el cinturón de seguridad abrochado.
Las primeras investigaciones confirmaron que casi el 70% de los pasajeros murieron en sus asientos, sin siquiera tener oportunidad de reaccionar. Aunque inicialmente se reportaron 290 víctimas fatales, la cifra podría aumentar debido al impacto en la zona residencial, donde al menos 27 personas perdieron la vida en el edificio alcanzado por el avión.
El accidente ocurrió en un momento crítico, cuando el Boeing 787 ascendía con los depósitos de combustible llenos, lo que intensificó la explosión. Mientras las autoridades siguen evaluando lo sucedido, se barajan dos hipótesis principales: una falla técnica en el suministro de combustible hacia los motores General Electric o una grave negligencia de mantenimiento.
Las calles de Guyarat amanecieron bajo estrictas medidas de seguridad ante la llegada del primer ministro Narendra Modi, quien visitó el hospital para reunirse con Vishwash y conocer de primera mano su relato. La policía local confirmó que ya no quedan cadáveres en el lugar, aunque las investigaciones continúan para esclarecer el origen del siniestro. Mientras tanto, los equipos de rescate han logrado recuperar una de las cajas negras, clave para entender qué sucedió en los segundos previos al impacto.
