La niña había salido al patio junto a sus familiares después de que se hicieran las 0.00 con la intención de ver fuegos artificiales. Según los primeros datos, cerca de las 2 de la madrugada una bala perdida le ingresó por la nuca. “Me quema, me quema la cabeza”, le comentó angustiada a sus familiares en los momentos previos a desmayarse.

La nena fue trasladada de urgencia desde su domicilio, en la calle Pedro Castelli al 354, al Hospital San Juan de Dios, pero debido a la gravedad del cuadro, se resolvió derivarla al Sanatorio de la Trinidad Ramos Mejía, donde permanece internada en terapia intensiva.

De acuerdo con la información oficial, la nena se mantiene estable pero en estado crítico debido a que la bala le quedó alojada en la fosa posterior del cráneo, sin orificio de salida.

La investigación quedó en manos de los fiscales Mario Ferrario y Valeria Curtade, miembros de la UFI N°3 de Morón. Por su parte, la Policía Científica realizó pericias alrededor de la manzana en donde ocurrió el episodio para tratar de determinar de donde provino el disparo.

En tanto, en la Ciudad de Buenos Aires hubo al menos 18 personas heridas por el uso de pirotecnia durante los festejos de Nochebuena. Hasta las 7 de este 25 de diciembre, el Instituto Oftalmológico Pedro Lagleyze asistió a diez pacientes, en todos los casos siendo cuadros ambulatorios.

Por su parte, otros siete fueron atendidos en el Hospital Santa Lucía, donde uno de ellos requirió una intervención quirúrgica en el ojo por lesiones menores. En tanto, en el Hospital de Quemados se atendió a una niña con heridas leves por quemaduras.