El Café Saeta, un emblemático establecimiento ubicado en la esquina de Chile y Perú en San Telmo, es noticia por un lamentable incidente de inseguridad. En la madrugada del domingo, el local fue blanco de un violento asalto a mano armada, perpetrado por cuatro individuos encapuchados.
Este suceso, que recuerda el reciente asalto a la pizzería «Jaimito» en Boedo, puso de manifiesto una vez más las preocupaciones sobre la seguridad en la Ciudad de Buenos Aires. A solo dos meses de su reapertura, después de permanecer cerrado durante dos décadas, el local gastronómico sufrió un violento hecho delictivo.
El propietario del café, Lucas Pérez, expresó su consternación por lo ocurrido: «Hace solo dos meses que abrimos, esta es la primera vez que nos roban». Pérez, quien adquirió el bar en 2019, había trabajado arduamente para restaurarlo, convirtiéndolo en un punto de encuentro para la comunidad de San Telmo.
El asalto ocurrió cerca de la 1 de la madrugada, cuando cuatro individuos llegaron en un auto negro y rápidamente ingresaron al establecimiento. «Fue un manoteo de cosas, algo de un minuto», describió uno de los empleados. Los ladrones, aunque jóvenes, actuaron con violencia y amenazaron a punta de pistola a las personas que estaban en el lugar. Se llevaron celulares, dinero en efectivo y objetos de valor.
Pérez, mientras tanto, continuaba con su compromiso de mantener vivo el legado del Saeta, un lugar con más de 150 años de historia en la ciudad. A pesar de este revés, su determinación de reconstruir este ícono de San Telmo sigue firme.
El Café Saeta tiene una rica historia que se remonta a 1865, cuando se llamaba «La Estrella». En 1962, el local adoptó el nombre de Saeta y se convirtió en un punto de referencia en el barrio. Sin embargo, en 2001, un trágico accidente ocurrido en el sótano llevó al cierre del establecimiento durante dos décadas.
La reapertura del Saeta en marzo de este año fue un acontecimiento esperado, no solo por los vecinos de San Telmo, sino también por aquellos que aprecian la riqueza cultural e histórica de Buenos Aires. Sin embargo, este reciente asalto ha planteado serias preocupaciones sobre la seguridad en la zona, especialmente para los locales comerciales.
Las autoridades están investigando el incidente, pero hasta el momento no hubo ninguna detención. Mientras tanto, Pérez y su equipo están evaluando medidas adicionales de seguridad para proteger a clientes y empleados.
A pesar de este contratiempo, el propietario del Saeta se mantiene optimista sobre el futuro del Café. Con el apoyo de la comunidad y su firme determinación, espera que este icónico establecimiento continúe siendo un lugar de encuentro y disfrute para todos los que visitan San Telmo.
