Ingrid Grudke se vio envuelta en un altercado en un gimnasio de la provincia de Misiones, donde una persona que se identifica como encargado del local la denuncia por supuestos daños. La controversia ganó notoriedad tras la difusión de varios videos en redes sociales, donde se observa a Grudke despegando con fuerza los carteles promocionales del gimnasio, mientras empleados observan con sorpresa.
Según la versión de Ingrid, que fue compartida en el programa 'Puro Show', su vínculo con el local es más complejo de lo que parece. "Ella y su ex novio, Martín Colantonio, eran socios del gimnasio. Aprovechó la oportunidad para traer productos de una marca de proteínas, que ella representaba, para su venta allí. Cuando surgió el escándalo con su pareja, el dueño de la marca decidió no seguir con la comercialización de sus productos en ese lugar, solicitándole que retirara toda la cartelería y devolviera lo que no se había vendido", detalló una fuente cercana.
El problema se intensificó, ya que, según informa Carolina Molinari, Grudke no solo actúa como garante del local, sino que posee el 50% de las acciones del gimnasio. Esto le otorga el derecho de despegar los carteles sin necesidad de autorización previa de nadie.
Además, una periodista local que informa sobre el avance de la denuncia por destrozos en Comisaría Seccional 1° aseguró: "Es raro porque ella es muy querida acá", añadió la periodista, sugiriendo que la comunidad tiene una buena imagen de Grudke.
Por otro lado, la situación personal de Ingrid es tumultuosa. Hace unos meses, la modelo descubrió que Colantonio la había engañado, involucrando a la pareja del sobrino de ella. Aunque él lo negó, la infidelidad fue confirmada con material de las cámaras de seguridad, lo que impactó profundamente a su familia, causando un revuelo que va más allá de una traición amorosa. A raíz de este nuevo conflicto en el gimnasio, el interrogante que ahora surge es si la situación terminará resolviéndose en los tribunales.
