El fondo Bainbridge presentó un pedido ante la justicia de los Estados Unidos para que la Argentina entregue las acciones de Aerolíneas Argentina y del Banco Nación, a fin de cobrar una sentencia por US$ 95 millones contra el país por bonos impagos del default de 2001.
El reclamo fue enviado a la jueza Loretta Preska el martes 3 de septiembre, llevaba la firma del abogado Anthony J. Costantini, del estudio Duane Morris LLP y adviertia que pese a haber obtenido en diciembre de 2020 una sentencia firme por 95.424.899,38 dólares, el monto "permanece completamente impago hasta la fecha".
Para eso el fondo buitre exigió como forma de pago del fallo favorable las acciones de esas dos compañías estatales; que esos activos se depositen en una cuenta custodiada en un banco de Nueva York; y que esa institución transfiera finalmente la titularidad al fondo.
Bainbridge es uno de los que no aceptó ninguno de los canjes de deuda que ofreció la Argentina tras el 2001. Se mantuvo fuera de las reestructuraciones de 2005, 2010 y 2016, y llevó su caso ante la Justicia de Nueva York, que en 2020 le dio la razón.
En 2023, Bainbridge había solicitado quedarse con parte de las reservas del Banco Central (BCRA), planteo fue rechazado por Preska. Meses atrás este fondo y Burford Capital pidieron la ejecución de acciones de la petrolera estatal YPF como forma de pago de sus sentencias.
Preska accedió, pero la Cámara de Apelaciones de Nueva York suspendió la orden, y en estos momentos está evaluando si confirma o rechaza esa decisión. En este caso hasta el propio gobierno de Donald Trump presentó escritos en apoyo a la postura argentina, y puntualizó los riesgos que una medida de ese tipo podría implicar para la inmunidad soberana.
De avanzar la orden, la Argentina podrá apelar y solicitar nuevamente que se suspenda su aplicación hasta que la Cámara se pronuncie, como sucedió en los casos anteriores.