El hijo de la Presidenta expuso sus bienes. Pero reveló que ella subvaluó sus empresas. La fortuna familiar supera los 130 millones de pesos. Lo insólito; podría no haber gastado ni un peso heredado.
Máximo Kirchner declaró bienes por 35.919.289,68 pesos. El hijo de la Presidenta se vio obligado, por primera vez, a exponer su fortuna al público, dado que es candidato a diputado nacional por el Frente para la Victoria, en Santa Cruz.
La fortuna del también líder de La Cámpora se basa mayoritariamente en la herencia que recibió tras la muerte de su padre, el ex presidente Néstor Kirchner. Sin embargo, a pesar de no conocérsele ningún trabajo formal, más allá de encargarse de la administración de las empresas familiares, Máximo K construyó un patrimonio por sus propios medios. O al menos, eso dice.
Máximo declara como bienes propios:
- Un lote de 35 mil metros cuadrados en El Calafate tasado en 292 mil pesos y adquirido en 2008. (Máximo pagó poco más de 8 pesos el metro).
- Una casa en Río Gallegos, de 332 metros cuadrados y adquirida en 2010, que valúa en poco más de un millón y medio de pesos.
- Una camioneta Honda CR-v EXL modelo 2008 que valúa en 185 mil pesos.
- Bienes de hogar cotizados, según aclara, en el “monto técnico” de 530 mil pesos.
- Una cuenta corriente con 54 mil pesos.
- Dos plazos fijos por un total de 115 mil pesos.
Sin contar la herencia que recibió ni su participación en las empresas familiares, el hijo de la Presidenta declara haber amasado una fortuna nada despreciable de 2.711.000 pesos. Su pareja, la funcionaria Rocío García, que depende de la Nación en un cargo santacruceño, curiosamente, no presentó aún declaración jurada alguna.
Pero el grueso de la fortuna del hijo mayor de los Kirchner proviene del patrimonio heredado tras la muerte de Néstor. Máximo declara que es propietario del 25 por ciento de los bienes que le legó su padre (el 50 por ciento, es parte del patrimonio de su madre, la Presidenta y el otro 25, de su hermana Florencia Kirchner). Eso es:
- Dos departamentos en la Ciudad de Buenos Aires. Uno de 160 metros cuadrados y otro de 392. Máximo valúa su 25% en 8.790 y 53.940 pesos, respectivamente.
- Cuatro casas en Río Gallegos de 200 y 90, 265 y 366 metros cuadrados, respectivamente, cuyo porcentaje valúa en un total de apenas 68 mil pesos.
- Un local en Río Gallegos, cuyo 25 por ciento tasa en 13 mil pesos.
- El 25 por ciento de diez departamentos en Río Gallegos, ninguno mayor a 52 metros cuadrados, por un total de 153 mil pesos.
- Su porción de tres locales en El Calafate. Uno, de 16 mil metros cuadrados cotizado en casi 4,5 millones de pesos. El segundo, de 2 mil y tasado en 1,3 millones. Y el último, de 47 mil metros cuadrados por 1,2 millones de pesos.
- El 25 por ciento de la casa de “veraneo” de los Kirchner en El Calafate que declara en 149 mil pesos.
- Su parte de cinco terrenos en El Calafate, que suman un total de 181 mil metros cuadrados por apenas 156 mil pesos. De tres tiene un cuarto de su propiedad. pero de otro, sólo un octavo.
- Un cuarto de otra camioneta Honda, de igual cilindrada pero modelo 2008 que valúa en 47 mil pesos.
- Una cuenta corriente heredada con 464 mil pesos. (Curiosamente no declara dinero en efectivo ni ahorros en dólares).
- Nueve plazos fijos también heredados por un total de poco más de 15,5 millones de pesos.
- Un crédito a favor de la empresa Panatel SA -una sociedad de la familia Relats, dueña del hotel Panamericano, que explotaba el hotel Los Sauces- por 460 mil pesos (un cuarto exacto de una deuda que, comparada con la declaración jurada de su madre, se elevaría a más de 1,8 millones de pesos. Aunque la familia Relats negó este préstamo en la Justicia).
- Cheques en “cartera alquileres” (no especificados, claro) por 131 mil pesos. (Duda: ¿existen cheques a cobrar en 5 años?)
(click en la imagen para ampliar)
Máximo Kirchner también detalla sus participaciones en la polémica Hotesur SA, la empresa dueña del hotel Alto Calafate, en la también hotelera Los Sauces SA y en CO.MA.SA, una firma dedicada a los servicios inmobiliarios que declarò domicilio en un sede de la AFIP calafeña. Pero además, por primera vez, revela que una famosa empresa de la familia K fue siempre suya: se trata de Negocios Inmobiliarios SA, más conocida por su nombre de fantasía, “Sanfelice, Sancho & Asociados”, la inmobiliaria que el juez Bonadio mandó a allanar con la policía metropolitana en Río Gallegos por la causa Hotesur, acto que finalmente fue la excusa para apartarlo del caso. Ni Néstor ni Cristina Kirchner habían declarado nunca participaciones directas en esta empresa: la conclusión obvia es que fue el negocio delegado a Máximo. De hecho, las acciones de esta firma son su bien más antiguo, ya que dice que se incorporaron a su patrimonio en agosto del 2005.
Esa participación la cotizó en casi 97 mil pesos. No se sabe cuánto le corresponde a sus socios, el ex gobernador santacruceño Carlos Sancho y el sospechado de ser testaferro del hijo presidencial, el empresario Osvaldo Sanfelice.
Justamente, es curioso que Máximo Kirchner no declare nada con respecto a la chacra que se habría comprado en un country de Zárate, tasada en 2,2 millones de dólares, según la revista Noticias. De acuerdo al mismo medio, aquella propiedad estaría a nombre del sigiloso Sanfelice.
Comparaciones odiosas.
La fortuna de Néstor Kirchner fue confusa en vida y con la declaración jurada de su hijo, aparecen más dudas. Al comparar números, la proyección indica que una fortuna familiar de la que gozan la Presidenta y sus dos hijos asciende cifras astronómicas. Pero si se mira en detalle, se pueden encontrar diferencias increíbles y sospechosas coincidencias entre lo declarado por Máximo y lo que juró tener Cristina. Veamos:
- Si se compara el 25 por ciento del valor de los 27 inmuebles (y de la camioneta) heredados como hijo que declara Máximo con el 50 por ciento que recibió CFK por enviudar la diferencia de valuación es apenas 6 centavos, una cifra irrisoria que supone un redondeo.
- Lo sospechoso es que algo similar suceda con la fortuna bancarizada. Máximo declara 11 centavos más que la Presidenta en los 9 plazos fijos y la cuenta corriente que heredaron de Néstor Kirchner hace casi 5 años. Es imposible saber los movimientos en las cuentas por parte de Máximo, ya que nunca antes informó sus bienes. Pero CFK sí lo hizo y los fondos se movieron. De hecho, crecieron con intereses a favor difíciles de explicar en el mercado bancario y hasta cambiaron su composición; hubo momentos en los que CFK declaró sólo 8 plazos fijos con dinero heredado. ¿Cómo puede ser que los números actuales sean iguales, es decir, que la plata heredada por Máximo sea la mitad exacta de lo que heredó Cristina aún un lustro después? Si suponemos que la gestión de ese dinero se derivó a una persona en común, haya sido la Presidenta, su hijo o un contador, la más insólita conclusión sería que Máximo K no tocó un peso del dinero que heredó de su padre. O, al menos, del bancarizado. Podría no haberlo hecho, ya que declara increíbles ingresos por 2,9 millones de pesos en un año (nada mal para alguien que sólo tiene estudios secundarios). Es eso o que su DDJJ fue dibujada como un espejo de la de su madre.
- Más sorpresivo aún es que esa milimétrica similitud no suceda cuando se habla de empresas. Ni Máximo ni CFK especifican sus porcentaje de participación en las mismas pero tampoco lo hacían en sus clonados números bancarios. Si se mantiene la lógica de que el líder camporista recibió un cuarto y la Presidenta la mitad de su valor, las proyecciones dejan diferencias abultadas. Cristina habría subvaluado sus empresas.
- Hotesur: Si se suman los revalúos accionarios de Hotesur que declara Máximo con las cifras heredadas que también expresa, para él la firma del hotel Alto Calafate vale 21.811.615,60 pesos. Para CFK, en cambio, cotiza en 20.286.283,40. Por ende, por su 50% la Presidenta habría declarado 762 mil pesos menos de lo que debía.
- CO.MA SA: Con la misma lógica (sumando créditos y revalúos) para Máximo la empresa valdría 1.033.711,24 pesos y para la Presidenta, 708.962,64. Ella habría declarado 162 mil pesos menos.
- Los Sauces SA: La diferencia es aún mayor. Máximo la valúa en 12.028.273,70 pesos y su madre, en 9.831.351,48. En este caso, Cristina habría subvaluado su participación por más de un millón de pesos.
- En cuanto a las deudas, la situación se divide. Se mantiene la proporcionalidad hereditaria en deudas con Panatel (Máximo declara que le debe 163 mil pesos y su madre, el doble) y con Austral Construcciones, de Lázaro Báez (Máximo adeuda 6 mil pesos, la mitad que CFK) Sin embargo, el hijo presidencial tiene una deuda propia por 14 mil pesos con Los Sauces SA. y le debe un poco más a Hotesur proporcionalmente. (Para CFK, la deuda al 100 por ciento sería de 4.630.686 pesos -declara la mitad- y para Máximo, 17 mil pesos menos)
Para constatar las comparaciones, aquí está la declaración jurada completa de Máximo 2014. Y aquí, la de Cristina.
#BONUSTRACK La verdadera fortuna K
La Presidenta declaró bienes por 64,6 millones de pesos Máximo declara bienes por 35,9 millones, de los cuales, 2,7 millones no fueron heredados. De Florencia Kirchner no se conocen declaraciones juradas y aunque se dijo que compró un semipiso de 300 mil dólares en el barrio de Constitución, bien podría haberlo hecho con los 33,2 millones que debería haber heredado de su padre. De ser así los auténticos K acumularon 28 inmuebles y medio. Sí, porque hay un lote en El Calafate cuya otra mitad no se sabe a quién pertenece.
Así, los Kirchner llegaron a disfrutar de bienes por 133,7 millones de pesos. Es un 1.910 por ciento más de lo 7 millones de pesos que declararon al asumir la presidencia en 2003. 12 años de una verdadera década ganada.
La fortuna familiar puede volverse una espada de Damocles sobre los Kirchner. Con las nuevas declaraciones se podría abrir una nueva investigación sobre su patrimonio y tal vez no exista un juez Oyarbide u otro dispuesto a cerrarla de inmediato o un Canicoba Corral que demore y haga lo mismo. Y lo peor para Cristina sería que esta vez, como en la causa Hotesur, la mira se pose sobre su hijo, el candidato.