Mientras continúa la polémica por el sueldo que se recibe en la Cámara de Senadores, luego de revelar que iban a recibir otro aumento de sueldo con la acreditación de junio, el senador de la UCR Martín Lousteau impulsó un nuevo proyecto para nivelar sus dietas.
Si bien este último aumento de sueldo no se llevó a cabo, el radical sostuvo su postura y cree que los senadores deberían ganar lo mismo que los directores de las escuelas primarias.
¿Cuánto ganan los directores de las escuelas primarias?
Cabe destacar que los sueldos de las máximas autoridades de los colegios de jornada completa varían entre un millón y casi dos millones de pesos, dependiendo su antigüedad, por lo que sería un monto mucho menor al que reciben los senadores hoy.
Según las actualizaciones de abril, los directores sin antigüedad tienen un sueldo básico de $360.500, pero luego de diferentes sumas como asignaciones e ítems, el salario asciende a $1.018.112. Luego de cumplir cuatro años, el sueldo comienza a aumentar, hasta llegar a un monto de $1.649.982 si el director estuvo en el cargo por 22 años. Estos números fueron difundidos por el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop).
¿Cuánto ganan los senadores?
En contraste, con el aumento que se votó en abril, un senador gana alrededor de cuatro millones de pesos en bolsillo. Dicho esto, la propuesta de Lousteau implicaría reducir la dieta de los senadores en un 60% aproximadamente.
El último acuerdo de los sueldos iba a subir el sueldo aún más, y los senadores iban a empezar a ganar más de $8 millones en bruto. Sin embargo, los titulares de todos los bloques legislativos decidieron dar marcha atrás con el incremento.
Fue luego de este posible aumento que Martín Lousteau escribió en su cuenta de X: “Los senadores tenemos que dar una respuesta real a un reclamo de la sociedad”. Dicho esto, en su momento contó que el 14 de mayo iban a presentar este proyecto para que sus dietas se igualen con las de los directores de primaria.
El radical explicó que «se tomó como referencia el sueldo correspondiente a un director de escuela con el máximo de antigüedad en la jurisdicción donde se asiente el Honorable Senado de la Nación, es decir, en CABA».
«Es de vital importancia garantizar que los senadores del interior del país cuenten con los recursos para desempeñar su tarea en el Congreso, pero los gastos de traslado y hospedaje deben estar debidamente justificados y alineados en relación a su función», agregó.
Luego, a modo de conclusión, manifestó: «Establecimos un descuento en la dieta para los senadores que falten a las sesiones o a reuniones de comisión», y además explicó que “quienes entren a trabajar con los senadores como planta transitoria, deberán irse cuando ese Senador finalice su mandato. No pueden haber pases a planta permanente».