Según Solano, Milei y su equipo habrían cometido delitos como defraudación, fraude contra la administración pública, abuso de autoridad y malversación de caudales públicos. En sus palabras: «El avión presidencial debería ser utilizado exclusivamente para cuestiones de interés nacional y no para que el presidente y su equipo viajen cómodamente a actos de partidos amigos suyos».
Solano también criticó la utilización de bienes y fondos públicos para beneficio personal y de aliados políticos ultraderechistas, mientras se persigue y denuncia a quienes luchan contra la pobreza. En este sentido, exigió una investigación y la aplicación de un castigo justo por los presuntos delitos cometidos.
En sus declaraciones, Solano destacó el contraste entre las acciones del presidente Milei y su discurso público, donde se presenta como defensor de la transparencia y el uso adecuado de los recursos públicos. Esta denuncia arroja luz sobre las tensiones políticas en Argentina y la creciente polarización en el país.
Por el momento, ni Javier Milei ni Karina Milei han emitido comentarios sobre la denuncia. Se espera que las autoridades investiguen el caso y determinen si se han cometido irregularidades en el uso de fondos y bienes públicos para asistir a eventos políticos en el extranjero.
La denuncia de Solano refleja las preocupaciones de una parte de la sociedad argentina sobre la integridad y la ética en el ejercicio del poder. Este caso podría tener repercusiones significativas en el panorama político argentino y en la percepción pública del gobierno de Milei.
