El Gobierno negó de manera tajante haber estado detrás o alentado el fallo que emitió la Corte Suprema de Justicia que ordenó la prisión para Cristina Kirchner y su inhabilitación para ser candidata, mientras que consideró que el PRO "debería pedir perdón" por haber acusado a La Libertad Avanza de haber tejido un pacto de impunidad con el kirchnerismo.

"El Gobierno no tiene nada que ver con fallos de tres instancias distintas que vienen desde hace diez años", enfatizó uno de los más encumbrados funcionarios de la gestión libertaria pocos minutos después de conocido el fallo ante un grupo de periodistas acreditados en Casa Rosada.

También fue consultado sobre las consecuencias políticas del pronunciamiento de la Corte y más precisamente sobre qué pasará ahora con el peronismo. "Con el fallo este se puede abroquelar o también se puede partir en mil pedazos, que es algo que suele pasar cuando ya no está más el líder", evaluó el dirigente al reconocer que no tenía del todo claro que podrá pasar en el futuro con el espacio justicialista.

Por último, ratificó que se seguirá aplicando el protocolo antipiquetes en los cortes de calles, autopistas y manifestaciones que se puedan producir por parte de la militancia kirchnerista en los próximos días para rechazar al fallo del máximo tribunal.

Antes de conocerse el fallo de la Corte, también se había pronunciado otro referente del gobierno libertario, quien alertó: "Será un fallo de la Justicia y habrá que respetarlo, nosotros no no vamos a dejar psicopatear con lo de proscripción o persecución. Es una decisión de la Corte, no nuestra".

También le preguntaron sobre cómo se manejarán frente a las protestas que se puedan producir en estos días por los sectores kirchneristas. "Ningún fallo judicial puede condicionar el accionar de las fuerzas de seguridad", sostuvo en referencia a que se mantendrá el protocolo antipiquetes.